San Juan (EFE).- Dieciocho ciudadanos dominicanos han sido detenidos esta semana en Puerto Rico al intentar entrar ilegalmente por la costa noroeste de la isla, informó este jueves la Patrulla Fronteriza (CBP, en inglés).
El suceso más reciente ocurrió este jueves, cuando agentes del CBP, afincados al sector Ramey en Aguadilla (noroeste), junto con la Unidad Marítima de la Policía de Puerto Rico, respondieron a un acto de contrabando marítimo en la zona de Añasco. Tras una búsqueda en el área, los agentes detuvieron a un hombre y una mujer, ambos de nacionalidad dominicana.
La segunda intervención de las fuerzas de seguridad ocurrió el 28 de mayo, cuando oficiales del CBP, junto con agentes de las Operaciones Aéreas y Marítimas (AMO) y una Unidad Marítima del Departamento de Policía de Puerto Rico, respondieron a un desembarque cerca del faro de Rincón. Allí, sobre una embarcación tipo “yola”, los agentes detuvieron a nueve dominicanos, ocho hombres y una mujer.
La tercera intervención ocurrió el 25 de mayo, cuando los agentes de la CBP de Ramey encontraron otra embarcación, también tipo “yola”, abandonada, que desembarcó en una playa en el municipio de Aguada.
Tras percatarse de la situación, siguieron las huellas de unos 30 individuos que se alejaban de la escena de los hechos. Los agentes del CBP, con la asistencia del Departamento de Policía Municipal de Aguada, rastrearon el área y detuvieron a siete varones adultos dominicanos. Según explicó en un comunicado de prensa el agente jefe de la CBP del sector Ramey, en Aguadilla, Xavier Morales, las detenciones fueron hecha por miembros de su agencia y de la llamada “Operation Stonegarden”.
El Programa de subvenciones Operation Stonegarden (OPSG, en inglés) está diseñado para mejorar la cooperación y la coordinación de la CBP con agencias locales, tribales, territoriales, estatales y federales de orden público en una misión conjunta para proteger la frontera. “Continuamos trabajando con nuestros socios locales para responder a los intentos de contrabando a través de nuestras fronteras costeras”, sostuvo Morales.
“Tener el apoyo público es fundamental para combatir el crimen y, en última instancia, mejorar la calidad de vida en nuestra región”, enfatizó.
Todos los extranjeros están siendo procesados por violaciones a la Ley de Inmigración federal. Las tres intervenciones en la pasada semana se suman a otras tres que la Guardia Costera estadounidense en San Juan llevó a cabo una semana antes, tras las cuales, el pasado 23 de mayo repatrió a 66 indocumentados, de un grupo de 68, que fueron detenidos en el Pasaje de la Mona, al oeste de Puerto Rico.
Del grupo de 68 indocumentados, un haitiano y un dominicano fueron procesados por las autoridades federales, pues enfrentaban posibles acusaciones por la Fiscalía federal en Puerto Rico por intentar reingresar a territorio estadounidense.