Bartolo García
Mao, Valverde, RD. – La tranquilidad del municipio de Mao quedó estremecida tras el esclarecimiento de un caso que ha causado consternación nacional. La Policía Nacional informó este lunes sobre el arresto de Juan José Guerrero Quezada, de 38 años, quien confesó haber asesinado y desmembrado a su hermana, Mildred Estefanía Guerrero Quezada, de 35 años, en un hecho ocurrido el pasado 24 de agosto.
La detención del acusado se produjo luego de un proceso investigativo exhaustivo, que incluyó el análisis de cámaras de seguridad, pruebas forenses y entrevistas especializadas. Con estas diligencias, las autoridades lograron recolectar pruebas concluyentes que no dejaron margen a dudas sobre su responsabilidad.
El informe policial detalla que, durante una reinspección realizada en el apartamento de la víctima y autorizada por el fiscal actuante, se encontraron restos humanos ocultos en recipientes, así como prendas de vestir impregnadas de sangre, lo que confirmó la brutalidad del crimen.
De acuerdo con el testimonio del propio detenido, tras cometer el asesinato procedió a desmembrar el cuerpo, intentando ocultar los restos en distintos lugares. Además, habría utilizado armas blancas, posteriormente lanzadas en las inmediaciones de un canal cercano a la cárcel pública de Mao.
La confesión del imputado reveló también que, tras el crimen, empeñó pertenencias de su hermana y vendió aves domésticas de la víctima, con el objetivo de conseguir dinero para adquirir sustancias controladas.
Las autoridades indicaron que este macabro hecho no solo muestra una violencia extrema, sino también una clara intención de encubrimiento. La coordinación entre la Policía Nacional y el Ministerio Público permitió obtener los hallazgos claves que llevaron al arresto inmediato del responsable.
Según fuentes del proceso, el móvil del crimen aún está bajo investigación. No obstante, los investigadores aseguran que se trató de un caso marcado por el consumo de drogas y problemas personales del acusado.
El Ministerio Público informó que el detenido será presentado en las próximas horas ante la justicia, para la solicitud de medidas de coerción correspondientes. El caso ha generado una fuerte indignación social, al tratarse de un crimen cometido dentro del núcleo familiar.
Vecinos y allegados a la víctima se mostraron profundamente conmocionados. Mildred Estefanía era conocida como una mujer trabajadora, respetada en la comunidad, y cuyo futuro se vio truncado por la violencia ejercida por su propio hermano.
El hecho ha encendido el debate sobre la violencia intrafamiliar y los problemas de adicción a sustancias controladas que siguen afectando a distintas comunidades del país. Organizaciones sociales han pedido mayor atención a la salud mental y a programas de prevención.
La Policía Nacional reiteró que mantendrá sus esfuerzos para enfrentar hechos de esta magnitud con toda la rigurosidad de la ley, asegurando que no habrá impunidad. “Este crimen atroz no quedará sin justicia”, enfatizó un portavoz de la institución.
La comunidad de Mao, en medio de la consternación, ha expresado su solidaridad con los familiares de la víctima, quienes enfrentan un dolor incalculable tras la pérdida.
La brutalidad del crimen, unido al vínculo familiar entre víctima y victimario, convierte este caso en uno de los más impactantes en lo que va de año en la República Dominicana.