El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó el domingo 25 de febrero que Rusia había logrado hacerse con los planes para la contraofensiva ucraniana de 2023 incluso antes de que comenzara, y cuyo fracaso asestó un duro golpe a Ucrania.
“Nuestros planes de contraofensiva estaban sobre la mesa del Kremlin antes de que comenzaran las acciones”, dijo el mandatario en una conferencia de prensa con motivo del segundo aniversario del inicio de la guerra.
Interrogada por la agencia de noticias AFP, la Presidencia ucraniana confirmó que Zelenski se refería a una filtración de información, pero no proporcionó más detalles al respecto.
El presidente ucraniano explicó que para compensar las “fugas de información” en el futuro, sus líderes militares estaban desarrollando varios planes de batalla para 2024.
Cuando se le preguntó si Kiev tiene planes de otra contraofensiva para el año en curso, dijo que Ucrania tiene un plan “caro”, una declaración que sigue a sus reiterados pedidos a países occidentales para recibir ayuda militar para nutrir sus filas.
La gran contraofensiva ucraniana del verano de 2023 se topó con poderosas líneas de defensa rusas que agotaron los recursos del Ejército ucraniano sin permitir la liberación de las regiones ocupadas, cuya retoma era el gran objetivo de Kiev para 2023, que fracasó por errores tácticos, falta de municiones y la superioridad bélica rusa, entre otros motivos.
La mitad de las armas occidentales se entregan tarde, según Kiev
Un día después de las conmemoraciones por el segundo aniversario del inicio de la ofensiva rusa, el ministro de Defensa ucraniano, Roustem Oumerov, lamentó este 25 de febrero que la mitad del armamento occidental prometido a Ucrania haya sido entregado tarde.
“En este momento, el compromiso no es igual a la entrega, el 50% de (estos) compromisos (de entrega de armas) no se cumplen a tiempo”, dijo el ministro. Debido a estos retrasos, “estamos perdiendo gente, estamos perdiendo territorios”, añadió.
El Ejército ucraniano, en dificultades en el frente, acaba de retirarse de la ciudad fortificada de Avdiivka, en el este, después de cuatro meses de duros combates, alegando falta de hombres y municiones. A partir de ahora, son las fuerzas rusas las que están a la ofensiva contra las tropas ucranianas.
Kiev reiteró el domingo que la ayuda estadounidense, crucial para Ucrania, está actualmente bloqueada por los legisladores republicanos que apoyan a Donald Trump, quienes tienen mayoría en la Cámara de Representantes. Con AFP