Muchas veces se evita la verdad porque suele ser dura y desagradable. Nunca recurra a la verdad ni a la realidad, salvo que esté dispuesto a enfrentar la ira que genera la desilusión. La vida es tan dura y problemática que aquellas personas capaces de inventar ilusiones a conjurar fantasías son como oasis en el desierto: todos van hacia ellas. Apelar a las fantasías de las masas es una fuente inmensa de poder.
El arquitecto William Reyna presidente de los movimientos el Cibao sigue con La Fuerza del Pueblo y el Movimiento Afíliate con la Fuerza del Pueblo y la 5Ta Republica argumento que el gran maestro y profesor de la política Dominicana Don Juan Bosch manifestó que cuando se conjugaban tres crisis sociales en una sociedad, brotaban cambio importante en el comportamiento de las diferentes sociedades, Don Juan hablo de una crisis Económica, En el gobierno del cambio del Lic. Luis Abinader Corona, su gobierno ha ejercido una enorme cantidad de préstamo sobre préstamo, un festival de préstamo en dólares que sobrepasan los más de 40,000 millones de Dólares, por lo cual ha generado una gran crisis económica, una devaluación sin precedente en el peso dominicano.
Mas de 90 mil millones fueron tomado del banco central para dinamizar y agilizar la economía Nacional y fueron repartidos entre cachanchanes, popis y amigotes del presidente.
Mas los dineros de la AFP del fondo de los trabajadores, que según rumores fueron prestado, muy blando a varios amigos del presidente Luis Abinader.
Esta crisis ha generado el alza desproporcionada de todos los servicios, sobre todo en el alto costo de la vida, la canasta familiar ha ascendido a más de $50,000 pesos dominicanos y el salario mínimo que devengan la clase obrera y mediana burguesía no le alcanza para sobrevivir.
El aumento desproporcionado de los combustibles, la factura eléctrica, y de los servicios en general se ha triplicados lo que hace insoportable mejorar las condiciones materiales de existencia del Pueblo Dominicano.
Esta crisis económica se conjuga con la crisis social, el deterioro del sistema judicial, la delincuencia policial, la delincuencia de cuello blanco y la criminalidad ha llevado a la familia dominicana a vivir en un constante estado de ansiedad, desasosiego y zozobra y a un nivel delincuencial como nunca antes visto en la historia “DEMOCRATICA” de La República Dominicana.
Estas dos crisis se han conjugado y están en su punto de ebullición más alto para desatar cualquier poblada, cualquier desorden callejero que rompa con la paz pública, la tranquilidad ciudadana en la frágil democracia que hoy vivimos los dominicanos, vivimos en un sistema de inseguridad tan grande que la población tiene terror salir después de la 6 de la tarde.
La descomposición social y moral del sistema “Democrático” la corrupción y los actos inmorales, ha permeado a la partidocracia dominicana, un deterioro moral sin precedente que en su gran mayoría los dirigentes de la oposición se han vendido como oveja al degüello al gobierno del Lic. Luis Abinader Corona, es vergonzoso como dirigentes nacionalistas y voceros de la oposición han sido comprados como reses con canonjías, prebendas, contratas y otorgamiento ilícito de bienes del Estado, han sido favorecidos con miles de tareas para que vendan sus plumas y sus vocinglerías politiqueras al gobierno de turno.
Todo lo antes mencionado está contribuyendo al deterioro masivo de los partidos tradicionales y al sistema de partidos, todo se va a consumar cuando se produzca una crisis política que está al borde del abismo, todos los partidos sin excepción están en crisis, tanto moral, ideológica y en corruptela, la poca renovación del liderazgo tradicional, la repartidera del Estado como un botín de guerra, las pocas oportunidades, los mercaderes políticos están llevando a este sistema oprobioso a un hecatombe política y una crisis partidaria sin precedente y de que explote la frágil democracia.
Cuando se conjuguen las tres crisis Económica, Social y Política que están al producirse, puede estallar cualquier poblada, anarquía, desórdenes callejeros y pueda desencadenar hasta una revolución armada.
El sistema de Partidos en la Republica Dominicana está al borde de colapsar y llegar a una hecatombe política, y a una Estampida social sin precedente en el frágil sistema “Democrático” que hoy conservamos tambaleándose los dominicanos.
