Un ingeniero argentino y una empresa colombiana han desarrollado una lámpara que funciona únicamente con agua salada. Un invento para el que coopera con las comunidades wayúu de la Guajira, en Colombia, un lugar desértico al lado del mar Caribe adonde no llega la electricidad. La compañía E-Dina utiliza la imagen de los wayúu para empezar a comercializar la lámparas y promete donárselas.
