Momentos de tensión se vivieron en una terminal del aeropuerto de Newark, en Nueva York, donde decenas de autos se incendiaron por causas aún desconocidas.
Unidades de bomberos llegaron el lugar para apagar el fuego y evitar que se siga extendiendo a otros vehículos.
Según las autoridades aeroportuarias, la actividad aérea no sufrió retrasos ni cancelaciones vinculadas al hecho, pese a la intensa humareda.