Un policía del cuartel 25 y ex marine de la armada de Estados Unidos, Keith Wagenhauser, de 33 años sobrevivió milagrosamente a fragmentos de una bala que le impacto el cráneo el sábado mientras dormitaba en el interior de su carro estacionado cerca de la estación policial después de concluir su turno con horas extras.
El oficial fue operado de emergencia en el hospital Presbiteriano de la Universidad de Columbia en la calle 168 y avenida Broadway en el Alto Manhattan donde los cirujanos lograron extraerle las esquirlas del plomo en una operación de varias horas.
Fue dado de alta ayer domingo y recibido con aplausos por docenas de sus compañeros el alcalde Eric Adams, la comisionada del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) Keechant Sewell y otros altos oficiales.
De inmediato, el NYPD anunció una recompensa de $10,000 dólares por información sobre el atacante.
“Esta es la promesa: vamos a atrapar al tirador, este es su final”, advirtió el alcalde Adams calificando como héroe al oficial que salió del nosocomio en una silla de ruedas y tuvo que ser auxiliado por uno de sus compañeros para levantarse y caminar en el centro de dos largas filas de uniformados que lo ovacionaron.
La bala disparada por un sujeto desconocido que huyó de la escena atravesó la ventanilla del crucero y los fragmentos se incrustaron en el cráneo del oficial.
Los investigadores no dejaron en claro si se trató de una bala perdida o si el agente fue el blanco del tirador.
“Vamos a atrapar a este tirador, y vamos a detener a los tiradores en la ciudad. Vamos a sacar armas de nuestra ciudad. Las familias no deberían tener que pasar por esto. Queremos que atrapen a este tipo”, añadió el alcalde que es un ex capitán del NYPD.
El agente había terminado un turno en el que trabajó horas extras desde la noche del año viejo (31 de diciembre) y estaba reclinado en el asiento del conductor de su automóvil frente al cuartel 25 la madrugada del sábado antes de una gira programada de un día cuando la bala rompió la ventana del lado trasero.
Los policías tuvieron que trabajar horas extras durante el fin de semana festivo después de que se cancelaron los días libres regulares debido a la escasez de personal por COVID-19.
El inspector adjunto Chris Henning, que comanda el cuartel 25 dijo ayer domingo que el policía tuvo la suerte de sobrevivir.
“Hoy es un día muy, muy afortunado para Keith, su familia y los miembros del NYPD”, añadió Henning.
“Esta es una ocasión trascendental”, dijo. “Es genial para la moral, es genial ver una sonrisa en el rostro de Keith y que se vaya con su familia”, señaló el comandante.
El NYPD está pidiendo a los comunitarios que llamen al 1-800-COP-SHOT (Disparo a Policía) por si alguien tiene información sobre los disparos.
La comisionada explicó que el agente tiene el cráneo fracturado y que uno de los cirujanos explicó que la bala no alcanzó las estructuras vitales de su cabeza por milímetros al entrarle por la sien.
“Somos afortunados y estamos agradecidos en este día de Año Nuevo”, dijo Sewell que fue juramentada horas antes del incidente.
Los disparos sonaron a las 6:15 de la mañana que hicieron despertar al agente baleado al escuchar los cristales rotos y sentir fuertes dolores en el lado izquierdo de su cabeza.
La comisionada informó que el agente herido fue auxiliado por un sargento después de salir de su carro, sangrando profusamente del lado de sien.
Por Miguel Cruz Tejada