FLORIDA, USA.- En un devastador accidente aéreo que ha conmocionado a la capital de Estados Unidos, un avión de pasajeros de American Airlines, operado por PSA Airlines, colisionó con un helicóptero militar Black Hawk durante la noche del miércoles. El trágico incidente ocurrió sobre el río Potomac, cerca del Aeropuerto Nacional Reagan, donde el vuelo 5342 realizaba su maniobra de aproximación final.
El avión comercial, un Bombardier CRJ-700 proveniente de Wichita, Kansas, transportaba 60 pasajeros y cuatro miembros de la tripulación. Se encontraba a una altitud de 121 metros y a una velocidad de aproximadamente 225 km/h al momento del impacto. La colisión resultó en una pérdida rápida de altitud y culminó en una caída mortal en las aguas del Potomac.
🇺🇸 | URGENTE
— UHN Plus (@UHN_Plus) January 30, 2025
Impactante video muestra el momento en que un avión y un helicóptero chocan sobre el río Potomac, cerca del aeropuerto Ronald Reagan en Washington, D.C. pic.twitter.com/LKMZUvcSuc
Por otro lado, el helicóptero Sikorsky H-60 Black Hawk, que llevaba a bordo a tres soldados en un ejercicio de entrenamiento, también fue partícipe del accidente. Los detalles del choque revelan que el helicóptero se acercó peligrosamente al avión, llevando a ambos aparatos a una explosión en el aire que fue visible en un vídeo que circula en redes sociales.
Equipos de rescate han recuperado aproximadamente una veintena de cuerpos del río, pero hasta el momento no se han encontrado supervivientes. Las operaciones de búsqueda y rescate continúan, aunque las posibilidades de hallar sobrevivientes son mínimas debido a la magnitud del desastre.
American Airlines ha confirmado los detalles del accidente y ha expresado su profunda preocupación por todos los pasajeros y la tripulación involucrados. “Estamos colaborando estrechamente con las autoridades para entender lo sucedido y apoyar a todos los afectados por esta terrible tragedia”, afirmó la aerolínea.
El presidente Donald Trump, informado plenamente sobre el accidente, ha declarado: “Este es un momento sombrío para nuestra nación. Dios bendiga las almas de todos los afectados. Agradecemos el esfuerzo incesante de los primeros intervinientes en el lugar.”
Además, el presidente criticó en su red social Truth la gestión del incidente, sugiriendo que la tragedia podría haberse evitado y cuestionando las acciones del helicóptero y la torre de control en los momentos críticos antes del choque.
Este accidente pone de relieve los riesgos inherentes de las operaciones aéreas en zonas concurridas y la necesidad de mejorar los protocolos de seguridad aérea para evitar futuros desastres. La comunidad espera respuestas mientras las autoridades continúan investigando las causas exactas que llevaron a esta fatal colisión.
