Suponer, el peor error que destruye parejas. ¿Te ha pasado? Nos referimos a esa situación donde ocurre algo inesperado y tratas de entender, de armar una historia sin escuchar a los involucrados. En pareja es muy común y si no cambias tu forma de pensar y te dejas llevar por tus emociones, colocas al amor en el más grande riesgo de todos.
Y es que por simple humanidad, tendemos a pensar que siempre tenemos la razón, cuando nos va bien, nos armamos de tanta confianza que asumimos que siempre sabremos qué hacer y no es así, pero en el caso de la pareja es más delicado, pues nuestras inseguridades juegan un gran papel y es decisión propia dejar que nos dominen o no.
Precisamente, las suposiciones son en parte derivadas de las experiencias más difíciles de nuestro pasado, también incluyen los miedos que aprendemos de nuestro entorno y la insistencia de tener la razón, por eso podemos convertirnos en nuestras propias peores enemigas.
Las suposiciones no solo se dan en la vida en pareja, ocurren con la familia, con los amigos, con los conocidos, pero es simple, no debemos dejarlas crecer. Como todo problema, solo necesitamos voluntad y ganas de cambiar, además de una buena comunicación con los involucrados para hacer nuevos acuerdos.
Si tu pareja debe llegar contigo a cierta hora y no lo hace, ¿qué es lo primero que piensas? Si tu pareja olvida una fecha que consideras importante, ¿por qué crees que ocurre? En ese momento nuestra mente puede elaborar todo tipo de historias y muchas de ellas son el peor escenario.
No es hasta que nuestra pareja nos cuenta lo ocurrido donde no damos cuenta de si acertamos o no y cuando estamos equivocadas, no siempre lo admitimos. ¿Ves cómo puede salirse de proporción?
Una cosa es suponer y otra cosa aceptar esos escenarios como verdad absoluta, debes reconocer que no es malo equivocarte, no es malo dudar pero sí aferrarte a ideas equivocadas. Cuando aprendes a escuchar al otro las suposiciones pierden poder, pues eres capaz de hacerles a un lado y entender la verdad, que muchas veces es algo inofensivo.
En pocas palabras, lo mejor es dar el beneficio de la duda, escuchar a tu pareja y explicar qué te llevó a esas suposiciones, si miente, la verdad siempre saldrá a la luz, pero el punto aquí es no dejar que tu mente te engañe y te aleje de las personas que aman y/o aprecias. Suponer es uno de los peores males, pero todos podemos salvarnos de él si lo decidimos. Por Brenda Colón Navar