23 días después del mortífero terremoto que azotó Turquía, en la provincia de Hatay encontraron con vida a un perro que quedó atrapado bajo escombros. Llamado Aleks, el husky siberiano fue rescatado tras dos horas de trabajos en el lugar.
Los rescatistas llegaron a Akcurun, Antakya, a petición del dueño del perro, Murat Arici, quien solicitó ayuda cuando escuchó los ladridos de su querida mascota entre los restos de un edificio derrumbado de dos plantas. Al ver a Aleks a salvo, Arici agradeció de inmediato a sus salvadores.
El perro quedó puesto en manos de miembros de la asociación de protección de animales HAYTAP, que lo llevaron a una clínica para recibir tratamiento veterinario. Uno de los voluntarios de la organización, Osman Polat, quien participó en el rescate de Aleks, describió como «un verdadero milagro» el hecho de que el can sobreviviera tanto tiempo sin agua ni comida. Contó a la agencia Anadolu que el animal perdió peso, pero en general su estado de salud es bueno.
Un video de la agencia noticiosa DHA muestra a los rescatistas extendiendo el brazo entre dos grandes losas de concreto y llamando al animal atrapado.
«¿Viene?», se escucha preguntar a uno de los rescatistas, acuclillado en un pequeño espacio entre los escombros del edificio.
«Aleks, venga querido», llama otro rescatista. «Muy bien, hijo».
Posteriormente aparecen los rescatistas abrazando al perro, quien se ve alerta y con buena salud mientras bebe agua.
«Cada criatura viviente nos importa, humanos o animales», declaró un socorrista citado por la agencia DHA tras el rescate milagroso.
Los socorristas han salvado a cientos de gatos, perros, conejos y aves atrapados en Antakya, una de las ciudades más golpeadas por el desastre.