Puerto Plata, RD. – El dirigente político Vladimir Céspedes, presidente provincial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en Puerto Plata, anunció su renuncia formal a la organización en una carta dirigida al presidente del partido, Danilo Medina.
Céspedes, quien cuenta con más de 40 años de militancia en el PLD y es miembro del Comité Central, ocupó la presidencia del Comité Municipal de Sosúa durante varios años, antes de asumir la presidencia provincial en 2019. Su decisión marca un nuevo capítulo en su carrera política, destacando que, aunque se desvincula del partido, continuará llevando consigo los valores y principios que defendió durante su trayectoria.
En su carta, Céspedes expresó: “Queridos amigos y compañeros del Partido de la Liberación Dominicana, hoy me encuentro aquí con un corazón lleno de gratitud mientras me despido de este gran partido que ha sido mi segunda familia. Quiero agradecerles sinceramente por el apoyo incondicional y por todas las experiencias compartidas. Cada uno de ustedes ha contribuido a mi crecimiento personal y político, y por eso siempre estaré agradecido”.
El exdirigente también destacó los retos y triunfos que vivió junto a sus compañeros, manifestando que aunque deja la militancia del PLD, su compromiso con los ideales de justicia y bienestar del pueblo dominicano se mantendrá intacto. “Sigamos adelante, siempre con la cabeza en alto”, añadió.
La renuncia de Céspedes llega en un momento en que el partido ha enfrentado otras bajas significativas. Recientemente, Jorge Espaillat, presidente municipal del PLD en Sosúa, también presentó su dimisión. Ambos dirigentes mantenían una estrecha relación con el exmiembro del Comité Político, Carlos Amarante Baret, quien fue expulsado del partido.
Además, rumores no confirmados indican que José Antonio Castillo (Chelo), presidente del PLD en Villa Isabela, podría seguir el mismo camino en las próximas horas, sumándose al grupo de dirigentes descontentos con la dirección actual del partido.
La renuncia de Céspedes y otros líderes locales refleja una creciente tensión interna dentro del PLD, que enfrenta desafíos en su liderazgo y cohesión, a medida que se aproxima un nuevo ciclo electoral.