Aunque durante otoño e invierno la gripe y los resfriados se llevan toda la atención, también proliferan otras infecciones virales, como bronquitis o norovirus. Sin embargo, una de ellas, la sinusitis, se volvió más común en las últimas temporadas debido a los malos tratamientos. Aquí te contamos todo sobre esta afección y cómo puedes hacer para combatirla.
La sinusitis ocurre cuando los senos paranasales (cavidades llenas de aire detrás de las cejas y pómulos, y entre los ojos) se inflaman o hinchan debido a una infección provocada por un virus, bacteria u hongo. Existen dos tipos: aguda, cuando los síntomas están presentes por cuatro semanas o menos, o crónica, cuando la hinchazón está presente por más de tres meses.
Tanto para los adultos como para los niños, esta condición puede verse favorecida por ciertos factores de riesgo: padecer fiebre del heno, fibrosis quística, ir a la guardería, fumar, tener estructuras anormales de los senos paranasales, un sistema inmune debilitado por el VIH o tratamientos como la quimioterapia, o someterse a cambios de altitud (al volar o bucear), entre otras.
Los síntomas de la sinusitis aguda pueden presentarse en los adultos tras un resfriado que no mejora o empeora después de cinco a siete días. Los más comunes son:
- Congestión y secreción nasal.
- Dolor de cabeza.
- Dolor de garganta y goteo retronasal.
- Dolor o presión detrás de los ojos o en los dientes.
- Fatiga y sensación de malestar general.
- Fiebre.
- Mal aliento o pérdida del sentido del olfato.
- Sensibilidad facial.
- Tos que generalmente empeora por la noche.
Las señales de la crónica son los mismos que los de la aguda, aunque tienden a ser más leves y a durar más de 12 semanas. En el caso de los niños se puede apreciar resfriado o enfermedad respiratoria que tras mejorar comienza a empeorar, fiebre alta junto con secreción nasal oscura durante al menos tres días y secreción nasal, con o sin tos, durante más de diez días.
Cómo protegerte
Según estiman los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en 2018 se registraron casi 29 millones de casos de sinusitis en adultos (11.6%), mientras que las visitas a consultorios médicos por esta condición alcanzaron los 4.1 millones, y en los servicios de urgencias fueron 389 000.
Una vez que ya padeces esta afección puedes optar por diferentes opciones para aliviar sus síntomas. Para reducir la falta de ventilación en los senos paranasales los especialistas aconsejan aplicar paños húmedos y calientes en la cara varias veces al día, beber mucho líquido (para diluir el moco), inhalar vapores entre dos y cuatro veces al día e irrigar la nariz con soluciones salinas.
Desde el saber popular también se recomiendan algunos remedios: verbena seca mezclada con aceite de oliva (para aplicar en cataplasma), infusión de lavanda, sal marina y aceite de oliva (para las fosas nasales), aceite de almendra (para masajear los pómulos), realizar inhalaciones descongestivas con tomillo, romero, pino, eucalipto o limón, y consumir alimentos como las zanahorias o el ajo, ricos en antioxidantes.
También se deben evitar los viajes en avión (por los cambios de altitud), realizar ejercicio regularmente y dormir entre siete y ocho horas por día. Si los síntomas duran más de diez días sin mejorar (la mayoría de los casos se resuelven por sí solos en ese momento), sientes un dolor intenso alrededor de la nariz y los ojos, fiebre por encima de los 40 ° C, o erupción de propagación rápida, deberás consultar a un profesional.
Al momento de recurrir a los medicamentos, los expertos aconsejan prudencia en el uso de descongestionantes nasales de venta libre, como la oximetazolina (Afrin) o neosinefrina, ya que, aunque pueden ser de ayuda en un principio, al utilizarlos más de tres a cinco días puede resultar contraproducente.
Otros tratamientos pueden ser: inyecciones para alergias (inmunoterapia) para ayudar a prevenir la reaparición de la enfermedad, evitar la exposición a alérgenos, y utilizar aerosoles nasales con corticosteroides y antihistamínicos para disminuir la hinchazón, en especial si hay pólipos nasales o alergias.
En los casos más extremos puede ser necesaria una cirugía para agrandar la abertura y drenar los senos paranasales, aunque esto se reserva para cuando los síntomas se extienden por más de tres meses con tratamiento o si se sufren más de dos o tres episodios de sinusitis aguda por año.
Crédito: Holadoctor