Las imágenes y videos de las aguas del río Nilo teñidas de color rojo recorrieron el mundo entero. En un hecho totalmente inusual, cambiaron su tonalidad habitual y este suceso llamó poderosamente la atención de los habitantes que residen en las cercanías de su cauce, como así también de los especialistas que comenzaron a buscar teorías que se adapten a esta insólita mutación.
Al ser el río con mayor longitud del continente africano, que abarca y conecta diez países como Burundi, Ruanda, Tanzania, Uganda, Kenia, República Democrática del Congo, Sudán del Sur, Sudán, Egipto y Etiopía, este extraño color de agua atemorizó a los habitantes de los países, quienes quedaron en shock al ver el agua con tonalidades rojizas.
Luego de este curioso suceso, los usuarios de las redes sociales comenzaron a viralizar este fenómeno y a indagar en los motivos que llevaron al agua a cambiar su color cristalino. Los primeros pensamientos se basaron en pasajes bíblicos sobre plagas que azotaron las adyacencias del río Nilo y convirtieron en sangre todo el caudal de agua.
Según el versículo 17 que se encuentra en el capítulo 7 del Éxodo en el texto sagrado, Moisés (profeta del judaísmo) golpeó con su bastón el río Nilo y eso provocó que el agua se conviertiera en sangre. “Así ha dicho Jehová: ‘En esto conocerás que yo soy Jehová: He aquí, yo golpearé con la vara que tengo en mi mano el agua que está en el río, y se convertirá en sangre’”.
En el mismo texto, pero en el versículo 21, se indicó: “Asimismo, los peces que había en el río murieron; y el río se corrompió, tanto que los egipcios no podían beber de él; y hubo sangre por toda la tierra de Egipto”.
Por otra parte, los especialistas en cuestiones marítimas empezaron a observar el día a día de los acontecimientos y llegaron a la conclusión que la proliferación de algas rojas fue un factor preponderante para que el agua cambiara radicalmente de color. A su vez, indicaron que estas plantas contienen toxinas en sus organismos y pueden ser peligrosos para los animales que viven en la zona, al punto tal de que podrían llegar a envenenarlos.
Este tipo de algas están presentes en ríos y mares profundos debido a que sus pigmentos se abastecen de la luz del sol que penetra en el agua. Una vez que los pigmentos absorben la luz azul y reflejan la roja, se convierten para mostrar su característico color rojizo.
A su vez, el medio Ecuavisa se contactó con la bióloga Cindy Fernández García, quien trabaja en el Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología -estudio de los ambientes acuáticos continentales- en Costa Rica y explicó que este fenómeno es “producido principalmente por dos grupos de microalgas: diatomeas y dinoflagelados” y agregó: “Estos microorganismos forman parte del fitoplancton, el alimento principal del mar, ya que de ellos se alimentan muchas especies”.
Sin una causa específica y contundente que pueda explicar este impactante fenómeno, se continúa en la búsqueda de más especialistas que puedan contribuir con su sapiencia para dilucidar qué fue lo que realmente sucedió para que tuviera lugar este drástico cambio.