Por Reynaldo Peguero
En 90 días se podrían concluir las normas de uso de suelo metropolitanas. Si logran alinearse como se espera, la Alcaldía de Santiago, Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo y su Viceministerio de Ordenamiento. Pavel Isa y Ulises Rodríguez tienen voluntad política y conceptualización. Urge la acción.
Acumulan recursos para desplegar un sistema normativo modelo de aplicación de la ley 368-22 de ordenamiento. Acumulan poder y saber para hacer concurrir con normas, los alcaldes y directores de las 15 circunscripciones municipales y distritales de Santiago que están conurbadas o en proceso de contigüidad de su huella urbana.
Se impone frenar la amenazante mancha gris encima de la tierra cibaeña, alejarse de la falla geosísmica septentrional y garantizar el futuro estratégico del Aeropuerto Internacional del Cibao (AIC).
El alcalde Ulises Rodríguez logró el índice SISMAP más elevado entre 158 municipios. Asimismo, acumula una masa crítica de urbanistas vanguardia en planificación estratégica. Formados en el Centro Iberoamericano Desarrollo Estratégico Urbano de Barcelona, el Consejo Estratégico de Santiago (CDES) y universidades.
El ministro Pavel Isa, tiene información y recursos. Posee el CENSO 2022, imágenes satelitales y técnicos en planificación territorial. También puede realizar el estudio de cultura democrática en uso y mal uso del suelo.
Por su parte, el viceministro Domingo Matías acumula mucha experiencia y estudios de uso de suelo de Santiago. Todos pueden concurrir en ordenamiento metropolitano. Con ese propósito, firmamos un pacto en las pasadas elecciones, para ordenar el crecimiento urbano de Santiago.
Por la extensión de la huella urbana y magnitud poblacional del municipio Santiago, se podría suponer que la mayor proporción de esa huella recaerá en esta circunscripción, falso. Apenas una mínima proporción (20%) de esa expansión, únicamente 1.26 km2 acontecería en el municipio cabecera. 80% sucedería en municipios y distritos municipales colindantes.
Seguramente en los de menor regulación urbanística como Puñal, Licey, Tamboril y Villa González y sus distritos Canabacoa, Guayabal, Las Palomas y Palmar Arriba, donde edificios y poblaciones ocuparán en promedio, hasta 4.8 km2 de estos territorios. También debemos incluir los DM del Municipio Santiago, Santiago Oeste, Jacagua, Hato del Yaque y La Canela. Gestando un manejo especial con Pedro García, del cual depende el agua de Puerto Plata.
Es momento de iniciar y concluir, el Plan de Ordenamiento Metropolitano. Comenzar por los 4 vectores urbanísticos críticos y 11 sectores de acelerada conurbación, estudiados por CDES. Todos bajo la rectoría del MEPyD, el Ayuntamiento Santiago y un Consejo Metropolitano de Ordenamiento Territorial con la participación de los alcaldes necesarios.
