Las urnas abrieron a las 7 (hora local) con la disyuntiva entre la alternancia o el continuismo del Partido Colorado. Los 4,7 millones de votantes eligen también a gobernadores, diputados y senadores
Por Maximiliano Pérez Gallardo
La jornada electoral en Paraguay empezó a las siete de la mañana y va hasta las cuatro de la tarde. Los ciudadanos del país sudamericano asistirán a las urnas para elegir a los integrantes de juntas departamentales, el congreso, los gobernadores de cada demarcación territorial, el vicepresidente y el nuevo presidente.
Aproximadamente 12.259 mesas electorales recibirán el voto de más de cuatro millones de personas, que están inscritas en el padrón electoral paraguayo.
El coloradismo, que ha gobernado en el país durante las últimas siete décadas -salvo durante el Gobierno del ahora senador progresista Fernando Lugo (2008-2012)-, se juega su continuidad en el poder ante una coalición de movimientos y partidos de izquierda.
Los resultados de la jornada definirán al sucesor de Mario Abdo Benítez, mandatario actual en Paraguay, que ya votó en una escuela en la capital.
“Hoy es un día importante para la democracia paraguaya, donde el pueblo tiene que salir a hablar”, declaró Benítez luego de depositar su voto en Asunción.
Por su parte, Santiago Peña, el candidato del gobernante Partido Colorado a la Presidencia de Paraguay, aseguró este domingo, antes de la apertura de la jornada de comicios generales, que “hoy definimos un modelo de país, elegimos si queremos un Paraguay que apostará más a su capital humano o volveremos a perder la enorme oportunidad de crecer impulsando el bienestar económico y social de nuestra gente”.
Luego fue al puesto de votación.
Un tiempo después se conocieron las primeras imágenes del principal candidato presidencial de la oposición paraguaya y líder de la coalición de centro-izquierda Concertación Nacional, Efraín Alegre, votando.
Paraguay, uno de los pocos países sudamericanos que no tienen segunda vuelta en su sistema electoral, tiene enfrente una reñida contienda entre el candidato del oficialismo de Partido Colorado, Santiago Peña, y la coalición de centro-izquierda liderada por Efraín Alegre, que se postulan como los favoritos para tomar el cargo de presidente.
Desde el sábado, el Gobierno nacional impuso una prohibición para la venta de alcohol, además del impedimento para celebrar eventos masivos, a menos de 200 metros de los centros de votación. En un esfuerzo para evitar personas en estado de ebriedad en la jornada.
“Estamos prestos para vivir y disfrutar de una gran jornada cívica. Invitamos a la ciudadanía a que salga a votar, a que participe con convicción democrática, lo cual es ya una tradición en la república del Paraguay”, mencionó Jorge Bogarín, presidente del Tribunal Superior de Justicia Electora.
Con Reuters y EFE