Las habrían conseguido en RD según medios de Estados Unidos
Parte de los mercenarios colombianos que ejecutaron el magnicidio en Haití, asesinando al presidente Jovenel Moïse y dejando grave a la Primera Dama, usaban placas y gorras de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) además de placas para vehículos que habrían conseguido durante su estadía en la República Dominicana, según publican medios de Estados Unidos.
En un allanamiento en la casa del presunto médico Christian Emmanuel Sanon de 63 años de edad, en Haití y radicado en Florida, acusado como autor intelectual del crimen, los policías haitianos encontraron placas de la y gorras de la DNCD, la agencia antidrogas de la República Dominicana y se hicieron pasar como “agentes” de la DEA, dicen las reseñas.
Sanon, quien es también un pastor evangélico y se identifica como médico no tiene el exequátur o licencia del estado de Florida para ejercer la medicina, aunque sí la de Haití, dijo el medio Conan Daily, mientras The Guardian asegura que se declaró en bancarrota hace varios años sugiriendo que no tiene recursos para haber contratado a casi 30 mercenarios y financiar el magnicidio.
Sobre el uso de las parafernalias de la DNCD, los medios estadounidenses ni las autoridades haitianas han confirmado como los mercenarios adquirieron las placas y las gorras, pero a diferencia de Estados Unidos, donde se venden réplicas de esos distintivos, en la República Dominicana está totalmente prohibido que los civiles las consigan en comercios a menos que no sobornen a oficiales de la propia agencia para acceder a ello.
Una de las versiones es la de que los mercenarios pudieron haber planeado el magnicidio en la República Dominicana y luego cruzar la frontera dominico haitiano, aunque no se especifica si fue por el norte (Dajabón) o el sur (Jimaní), donde usando y mostrando los distintos oficiales, habrían pasado fácilmente por los controles fronterizos en una de las fronteras más frágiles del mundo.
Hasta el momento, el Gobierno dominicano no se ha referido a la estadía ni al eventual cruce por la frontera de los mercenarios aunque se cree que hay una investigación activa para determinar los movimientos hechos por magnicidas en la República Dominicana.
Sanon, se viene promoviendo como el “líder” que necesita Haití, mantiene una campaña contra la corrupción de los gobiernos de su país natal, y advirtió en un video en youtube titulado “Los corruptos líderes haitianos” con el lema “Acción Positiva e Integridad Absoluta” en el que advertía sobre la necesidad de derrocar al presidente asesinado porque “se había robado la democracia”.
El periódico Washington Post reveló que Sanon aterrizó en Haití en un avión privado en junio para ultimar los detalles del magnicidio después de reclutar a los mercenarios a través de una empresa de seguridad, CTU, con sede en Miami.
Esa versión fue confirmada por el jefe de la policía de Haití, Leon Charles.
“Este es un país con recursos”, dice Sanon en su video.
“Nueve millones de personas no pueden estar en la pobreza cuando tenemos tantos recursos en el país. Es imposible… el mundo tiene que dejar de hacer lo que está haciendo ahora mismo. No podemos soportarlo más. Necesitamos un nuevo liderazgo que cambie la forma de vida”, denunciando que las grandes potencias van a Haití para robarse el oro, el uranio y todas las minas que hay en la media isla, a cambio de proteger y ayudar a los políticos y congresistas corruptos.
Por Miguel Cruz Tejada