Por Marcelo Peralta
Santiago, R.D.– El periodismo radiofónico es una forma de comunicación social que permite dar a conocer y analizar los hechos de interés público a través de las estaciones radiales.
Así lo analiza el periodista Luis Amilkar Gómez quien fue jefe de redacción del desparecido noticiario “La Situación Mundial” que formaron Ramón de Luna y su esposa Minucha Pezzoti y un elenco de de locutores de altas calificaciones.
Gómez dijo que el periodismo de radio en esa época era muy riesgosa porque era en los oprobiosos tiempos de la dictadura del presidente Joaquín Balaguer, su Partido Reformista, la temible banda colorá.
Recuerda que el periodismo radiofónico en especial “La Situación Mundial”, porque las noticias debía ser claras, precisas, concisas y redactadas al estilo de Ramón de Luna.
Ostentó las funciones de redactor después de trasladarse desde la ciudad de Sabaneta, provincia Santiago Rodríguez donde inició en labor de corresponsal.
Gómez dice que a los locutores había que facilitarle las lecturas de las noticias sin tropiezos y fácil de expresión, porque las voces eran sincronizadas.
Además, sostiene que la lectura en radio hace necesaria una redacción cuidada y adecuada a este medio, hacerse de manera sencilla, mediante el uso de palabras y oraciones comprensibles desde el punto de vista conceptual y fónico.
Recordó que cuando fue jefe de redacción de La Situación Mundial había periodistas de la estirpe de Ignacio Guerrero traído a Santiago desde la Provincia Montecristi; Rafael Monsanto, Gerardo Santos, Narciso Pérez, Adalberto Domínguez, Roberto Rodríguez, entre otros.
Un elenco de locutores de la talla de Ramón De Luna, quien era su director, su esposa Minucha De Luna; Manuel Villa, Eusebio Sánchez, Alex Salas, Oscar Martínez y Carlos Manuel Estrella.
Al ser entrevistado en el programa dial “Dos Generaciones” que produce el veterano periodista Adriano de la Rosa, Luis Amilkar Gómez dice que en las noticias radiales conviene recurrir a la reiteración de ideas, conocer contenido, hacerlo con el objetivo de que la memoria del receptor lo retenga ya que el mensaje radiofónico es rápido.
Defendió el periodismo radiofónico que a pesar de las limitaciones, sin embargo, se hacía en época pasadas se resume en la premisa, contar todas las cosas que pasan, en el momento mismo de los hechos, con toda la carga informativa, emotiva y en el menor tiempo posible.
En Santiago, además de trabajar como redactor en “La Situación Mundial” fue pionero en la carrera de periodismo de la Universidad Tecnológica de Santiago -UTESA-.
Se fue a la Unión de Repúblicas Sociales Soviéticas -URSS- donde estudió Ingeniería de Minas y al regresar formado a República Dominicana y con la ilusión de poner en práctica lo aprendido en beneficio de su país, no fue contratado por ninguna de las empresas mineras.
Luego trabajó como reportero en el canal oficial Radio Televisión Dominicana.
Se fue a Estados Unidos, donde para sobrevivir debió realizar una series de oficios desde vendedor en bodegas, taxista, entre otros.
Después se incorporó a impartir docencia donde permaneció por espacio de 30 años hasta que fue jubilado.
De su experiencia en la URSS y Estados Unidos, el periodista, profesor, ingeniero de minas y auténtico sabanetero para narrar partes de las vivencias escribió el libro “Mi vida entre dos Monstruos”.
La obra literaria ha creado impactos, la que ha sido puesta en circulación en diversos pueblos de la República Dominicana y otras naciones del mundo.
Junto a Luis Amilkar Gómez, en la entrevista con Adriano de la Rosa, participó la periodista Germania de Luna, hija de Don Ramón de Luna.
Gómez, De la Rosa y De Luna hicieron anécdotas acaecidas en el riesgoso ejercicio de la comunicación.