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La Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM) fue oficialmente fundada en el 1955, a pesar de haberse establecido de manera no oficial en 1951 y en toda la historia no ha existido una rivalidad más encarnizada que aquella protagonizada por los dos equipos más exitosos del béisbol dominicano, Tigres del Licey y Águilas Cibaeñas, quienes en la actualidad cuentan con 22 y 21 coronas de campeonatos, respectivamente.

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Estos dos equipos son los que más finales han disputado a lo largo de la existencia del torneo de béisbol otoño-invernal y entre ellos existe una especie de adversidad deportiva creada por los enfrentamientos históricos protagonizados entre ambas escuadras y por los choques entre sus fanáticos. A raíz de esto, es sumamente extraño que entre ambos equipos se den transacciones que involucren el cambio de jugadores.

En las últimas horas, ambos equipos han confirmado el que apenas sería el sexto cambio en la historia entre franquicias. Los Tigres enviaron a Arismendy Alcántara, jardinero y jugador utility a las Águilas por el receptor Pedro Severino, quien milita en la MLB con los Orioles de Baltimore.

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Alcántara ha acumulado desde el 2010 a la fecha un promedio de bateo de .250, con un porcentaje de embasarse (OBP) de .315 y un slugging (SLG) de .404, en 195 partidos con los Tigres del Licey. Por su lado, Pedro Severino solamente ha accionado en 52 encuentros, todos con las Águilas, donde tomó 140 turnos para compilar un promedio de bateo de .221, un OBP de .270 y un SLG de .350.

La primera ocasión en que los azules y los aguiluchos cambiaron jugadores ocurrió en octubre de 1955. En esa transacción los felinos obtuvieron a los lanzadores Pedro Tineo y Atiliano Domínguez, mientras que enviaron a las Águilas al jugador del cuadro interior, Fabio Fiallo y al lanzador Wildredo Echavarría.

Transcurrirían casi treinta años antes del próximo cambio entre los eternos rivales del béisbol dominicano, cuando en septiembre de 1985, las Águilas recibieron al jardinero Víctor Mata y al infielder Juan Castillo a cambio del lanzador Joaquín Andujar, quien pasó a los Tigres. El tercer cambio llegó diez años después, cuando en 1995 el Licey recibía al jardinero Manny Martínez y al lanzador Rafael Roque por los lanzadores Dario Veras, José Parra y el jugador del cuadro Tony Batista.

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Los últimos dos cambios entre Tigres y Águilas se dieron recientemente, cuando en el 2018, los azules obtuvieron al jugador del cuadro, Erick Mejía, mientras que enviaron a José Marmolejos, primera base y jardinero, al Cibao. Finalmente, en marzo del 2019 fue anunciado que el lanzador Ulises Joaquín llegaría al Licey vía cambio con las Águilas, por el lanzador José Domínguez.

La realidad es que la LIDOM no es una liga donde se vean cambios con mucha frecuencia, a pesar de que en los últimos años se ha podido percibir un ligero aumento en las transacciones entre equipos para obtener jugadores. A pesar de esto, es todavía una sorpresa cuando estos grandes rivales deciden hacer negocios.

 

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