Llegó con la seguridad que tiene una persona que sabe el talento que posee. Con flow urbano y una historia de sacrificios detrás Evaristo Martes pisó el escenario de Dominicana’s Got Talent.
Él cautivó a los jueces y el público del concurso a base de una fusión musical ente la salsa que cantó y el estilo urbano de vestir. “Todo el mundo creía que yo era urbano al verme el flow y el estilo, y de repente le salí con una salsa, motivé el público y a los cuatro jueces que me dieron el sí”, señaló a Diario Libre, luego de su presentación.
¿Cómo inicia en la música? Evaristo respondió que, “inicié visitando las iglesias cristianas y ahí fue donde formé mi voz. Nunca he estudiado canto, esto es de naturaleza”, detalló.
Al ser cuestionado sobre qué quería proyectar en el escenario, su respuesta fue contundente.
“Yo quería demostrar seguridad y que el peso no limita a nada. Hay muchas personas que, porque estamos en sobrepeso nos imitamos, y decimos, no podemos cantar, no podemos salir en televisión, y con esto les estoy demostrando a la gente de que sí se puede, y que podemos ir hacia donde nosotros queramos , porque los sueños se pueden cumplir”, enfatizó.
Dueño de una potente voz y una gran capacidad para bailar, se considera un artista completo, algo que demostró durante su participación.
Con su gracia, voz, swing y movimiento, Evaristo levantó a todos de la silla.
De los Guandules para el mundo
Durante su presentación en Dominicana’s Got Talent, el cantante de 28 años, y que en la actualidad vive en Arroyo Hondo, destacó que por nacer y crecer en Los Guandules, muchas veces se sintió discriminado, pero que esto le sirvió de inspiración y fortaleza para lograr sus sueños.
“Mi niñez fue tosca, porque mi mamá al yo siempre ser áspero no me dejaba jugar (con otros niños)”, confesó.
“Muchas personas cuando saben que vienes de Los Guandules tienen un cierto miedo, y dicen él es de ahí hay que tener cuidado”, argumentó.
Confesó que por su peso también sintió rechazo, además de venir de un hogar encabezado por una madre soltera.
“Mi papá se fue cuando yo tenía 12 o 13 años y mamá fue quien nos crió”, detalló.
Sin embargo, asegura que la música le ha ayudado a superar los prejuicios.
“Cuando yo subo a un escenario yo me transformo”, concluyó.
Su seguridad y dominio le hicieron arrancarles los cuatro sí a los jueces y la ovación de un público que bailó y disfrutó su participación en Domnicana’s Got Talent.
Articulo publicado originalmente en el Listin Diario.