Los incrementa para seguir conteniendo la inflación, como ya decidió la semana pasada el Banco Central Europeo
La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido este miércoles seguir con su plan de incrementar los tipos de interés para contener la inflación y vuelve a subir los tipos de interés un 0,25% a pesar de la inestabilidad financiera generada por la crisis del Silicon Valley Bank (SVB) y el Signature Bank. Con esta subida se sitúan en un rango de 4,75% al 5%.
Además, el organismo estadounidense ha querido mandar un mensaje de tranquilidad y ha dicho en un comunicado en el que ha comunicado la deicisón que el sistema bancario “es sólido y resistente”.
Con esta subida de tipos, se trata del noveno incremento consecutivo y es de la misma cantidad que la que ya llevó a cabo en febrero, cuando los situó en el entorno del 4,5% al 4,75%.
Aunque el presidente del banco estadounidense, Jerome Powell, indicó en la primera semana de marzo que “queda un largo camino” con respecto al alza de tipos, este miércoles ha cambiado el discurso y ha anticipado este miércoles que, como consecuencia de la reciente crisis bancaria, los aumentos de las tasas de interés actuales pueden no ser adecuados para contener la inflación. “En cambio, ahora anticipamos que alguna política adicional de firmeza pueda ser adecuada”, ha dicho en una rueda de prensa a raíz de esta reciente subida de tipos.
No obstante, muchos expertos consideran que la entidad debería frenar las subidas en un entorno de incertidumbre bancaria tras la caída del SVB. De hecho, el presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, han advertido contra los peligros de utilizar la política monetaria para mitigar la inestabilidad financiera: “La política monetaria no debería tratar de ser aprendiz de todo y maestro de nada”.
Por su parte, la secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yallen, ha defendido este martes la “solidez” del sistema bancario del país, recalcando que la situación actual no puede compararse con la crisis de 2008, ya que el sistema financiero es ahora “significativamente más fuerte” que entonces. “La situación se está estabilizando y el sistema bancario estadounidense permanece sólido”, ha indicado en un discurso de la Asociación de Banqueros de Estados Unidos en Washington.
Un contexto alterado por la crisis del Silicon Valley Bank
Todo esta situación de incertidumbre bancaria se debe a la quiebra del SVB y del Signature Bank, que provocó desplomes y volatilidad en las Bolsas mundiales durante la semana pasada, incluidos bancos europeos como el Credit Suisse, cuya crisis se resolvió al ser adquirido este fin de semana por su competidor UBS. Con todo, los mercados y bancos mundiales han vivido una de las semanas más duras a nivel financiero en mucho tiempo.
En este contexto, tanto Janet Yellen como Jerome Powell han tratado de aportar cierta estabilidad, asegurando a los ciudadanos y a los mercados que la situación no desembocará en una crisis financiera. De hecho, la Fed ha puesto en marcha un nuevo fondo para que los bancos que necesiten asegurar los depósitos de sus clientes tengan dinero para hacerlo.
Además, los principales bancos de EE.UU se unieron la semana pasada para rescatar al First Republic Bank con 30.000 millones de dólares, que amenazaba con seguir el camino del SVB y el Signature Bank tras una fuerte caída del valor de sus acciones.
Sigue los pasos del Banco Central Europeo
Laa decisión de la Fed se produce en un escenario donde ya otro banco mundial importante, el Banco Central Europeo (BCE), mantuvo la semana pasada su plan de subir los tipos de interés en 0,5 puntos para frenar la inflación, hasta el entorno del 3,5%, a pesar de la inquietud en los mercados que generó la crisis del banco suizo Credit Suisse la del SVB.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha antepuesto la misión de llevar la inflación al objetivo del 2% -lejos del 8,5% alcanzado en febrero-, antes que contener las subidas por la incertidumbre de los mercados. De hecho, quiso darles cierta tranquilidad dejando claro que el BCE tenía las herramientas necesarias para dotar de liquidez a los bancos tras la crisis del Credit Suisse y el SVB: “Estamos preparados para responder como sea necesario para mantener estabilidad de precios y financiera en la zona euro”.