La periodista argentina contó su experiencia como madre primeriza de Benicio, el hijo que tiene con Federico Valverde. Además de remarcar el lado B de los cuidados de un bebé, aseguró que volvería a transitar este camino
Mina Bonino se convirtió en mamá con la llegada de Benicio, fruto de su relación con Federico Valverde, el jugador uruguayo del Real Madrid. La periodista oriunda de Quilmes hizo una llamativa reflexión en las redes sociales sobre el lado B de la crianza de un bebé a un mes de haber dado a luz. Más allá de la parte negativa, afirmó que volvería a transitar este camino porque “te cambia la vida”.
“La maternidad es una mierda. Pongámonos a desmitificar tapas de revista donde la maternidad es color de rosa. La maternidad es una mierda. Duele, duele hasta las lágrimas. Cansa, te agobia, te arrepiente. Te hace levantar a las tres. A las cuatro, a las cinco, a las seis”, escribió la joven desde su cuenta oficial de Instagram.
“La maternidad te recuerda que estás gorda, despeinada, hinchada, desarreglada. No es mágico. No existe esa conexión. Dar el pecho es una mierda. Una mierda muy necesaria, pero una mierda en fin. La maternidad es culposa. Viene para criticarte. Te juzga. Te señala con el dedo para decirte que no estás haciendo las cosas bien. Te encuentra angustiada. Triste. Y a su vez tan feliz que te marea. No importa cuán acompañada estés. No importa cuántos pañales cambie el padre. La maternidad siempre te hará sentir sola”, explicó.
En la red social, la ex panelista de Intrusos había contado que tuvo un parto difícil que duró 14 horas. Acompañada por un equipo médico en una clínica de España, prefirió hacer todo lo posible para no ir a cesárea. “No elegí lo rápido, elegí lo que me decía el corazón, acompañada de los médicos sabiendo que mi bebé no sufría. Mi dolor pasaba a segundo plano, y les aseguro que cuando te dicen que te tienen que dormir al 100% vas a querer llegar hasta las últimas consecuencias para no despegarte de tu hijo y saber que todo está bien”, había señalado.
“La maternidad es cruel. Viene para pegarte una piña y sacarte de esa burbuja donde sí era todo color de rosa. Vas a querer tirar todo a la mierda. Vas a querer llorar y después sonreír. Te vas a cuestionar. Vas a aprender a equivocarte. La maternidad es una mierda. Una mierda que te sacude el corazón y crees que no te entra más espacio para amar a alguien. Una mierda que te hace reencontrarte como humano. Una mierda que te empodera”, manifestó.
“Sí, dar la teta es una mierda. O ¿Quién no quiso rendirse el tercer día cuando la leche no bajaba? ¿Quién no quiso rendirse ante el dolor de cada succión? ¿Quién no se sintió menos madre por darle mamadera? Porque eso es lo que te hacen creer. La maternidad es una mierda. Pero volvería a elegir mil veces más pisar y nadar entre la mierda, porque por más mierda que sea. La maternidad te cambia la vida”, afirmó Bonino.
La periodista y el jugador uruguayo del Real Madrid blanquearon su noviazgo en marzo de 2019 a través de las redes sociales. A dos meses de conocerlo, ella decidió apostar por esta relación, dejó la Argentina y se instaló en España. En ese momento, consiguió trabajo en un diario local para cubrir los partidos del Real Madrid. En noviembre de 2019, anunció en Instagram que estaba en la dulce espera.
Mina admitió que dudaba de poder quedar embarazada por los problemas alimenticios que había sufrido. Cuando finalmente se enteró de que había quedado, estaba feliz, aunque no todo fue color de rosa. “Siempre se habla de que las embarazadas son las más lindas, que tienen un brillo especial, que se sienten plenas. Pero también existe un lado que nadie te cuenta y es que cada mujer lo procesa como puede. En mi caso, nunca me sentí plena ni con ese brillo especial”, reveló.
En diálogo con Teleshow, describió el embarazo como “un estado raro”: “Es hermoso porque llevás una vida dentro tuyo y cuando ves las ecografías, o escuchás el corazón, te cuesta asimilar que estás formando otro ser. Pero también te toca combatir la mirada ajena, porque a la mayoría de las chicas no se les nota la panza hasta los cuatro meses, pero sí en la cara o en la retención de líquidos. Y claro, uno quizá te pregunta sin saber que estás creando una vida. Pero son enseñanzas”. infobae.com