Guatemala, 8 mar (EFE).- La cantante de rap y hip hop guatemalteca Rebeca Lane aseguró que la muerte de 41 niñas bajo la custodia del Estado de Guatemala hace este viernes dos años fue un “femicidio estatal”.
“El Estado tiene absolutamente responsabilidad sobre lo que pasó”, dijo Lane a Efe, y agregó que es una muestra más de la “violencia continuada del Estado contra el cuerpo de las mujeres”, que “si te levantas” te encierran y te queman.
La creadora de rimas y versos crudos, quien sintió esa tragedia en carne propia como “si me hubiera pasado a mí también”, denunció además la forma en la que el caso fue tratado mediáticamente, culpabilizando a las pequeñas, del as que se dijo que tenían problemas con la ley, cuando no era así.
“Si vos desinformás a la población, ya no va a exigirte cuentas”, resumió, y apuntó que hay “múltiples factores” que han hecho que este caso, que sucedió el Día Internacional de la Mujer de 2017, esté invisibilizado.
“La mayoría cristiana y buena de Guatemala -prosigue irónicamente-, se lavó las manos y dijo que se lo merecían, se merecían morir así”, denunció, pero agregó que se trata de una acción “deliberada”.
El 8 de marzo de 2017, 41 niñas murieron calcinadas encerradas en un aula pequeña bajo llave, donde originaron un incendio para protestar por las constantes violaciones físicas y psicológicas de las que fueron víctimas.
Además de las 41 niñas fallecidas, la tragedia dejó a 15 heridas. Todas, las 56, habían sido encerradas bajo llave en un aula de unos 46 metros cuadrados donde originaron un incendio en la mañana del 8 de marzo para que las autoridades y policías, que las habían metido allí, les permitieran salir al baño luego de estar toda la noche prisioneras.
Sin embargo, la Fiscalía asegura que la subinspectora de la Policía, Lucinda Marroquín, mantuvo la llave del candado de la puerta en el cinturón durante 9 minutos sin abrir, mientras el fuego y el humo causaban la muerte y herían a las menores.
El día anterior, el 7 de marzo de 2017, un grupo de adolescentes (56 niñas y 43 niños) había intentado escapar del Hogar Seguro para denunciar violaciones a sus derechos, pero fueron recapturados y concentrados frente al portón del centro de acogida, que se encuentra a 22 kilómetros de la capital, en el municipio metropolitano de San José Pinula.
Por este caso hay al menos unas 8 personas que deberán enfrentar un juicio por diversos delitos como homicidio culposo, lesiones culposas, maltrato contra personas menores de edad, abuso de autoridad e incumplimiento de deberes.
Lane aseguró que ahora el 8 de marzo es una fecha más dolorosa, que se ha convertido en un “espacio de lucha y reivindicación” y por eso harán varias actividades para recordar a las 56 víctimas y exigir justicia: “Aunque seamos pocas no las abandonamos”. EFE