En los últimos siete días se conoció el dato de inflación de abril, que fue más alto que el de marzo y da cuenta de que el fenómeno del incremento sostenido de precios no está pudiendo ser controlado, aunque desde el Gobierno siguen ensayando medidas para hacerlo.
En ese contexto, colectividades organizadas de los sectores populares realizaron una marcha de protesta este jueves 18 de mayo para pedir más apoyo del Estado, mientras avanza el ajedrez del armado electoral de las principales fuerzas políticas de cara a las elecciones presidenciales de este año.
La exmandataria y actual vicepresidenta Cristina Fernández volvió a decir que no irá en la boleta del oficialismo, que sigue en camino de resolver sus candidaturas.
Gran marcha de movimientos sociales
En la Ciudad de Buenos Aires, este jueves fue día de protestas de movimientos sociales-en el que participan sectores de bajos ingresos, con empleos precarios o que se sostienen con ayuda estatal- reunidos en la Unidad Piquetera, a la que se sumaron, entre otros, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, una organización que hoy es oficialista.
Aunque las manifestaciones de estos sectores son habituales, la Unidad Piquetera prometió llevar a cabo una de las movilizaciones más grandes que hayan hecho en los últimos 15 o 20 años. Sus miembros se desplazaron desde distintos puntos del país y pasaron la noche del miércoles 17 de mayo acampados frente a la casa de Gobierno. El jueves la protesta se llevó a cabo frente al Ministerio de Desarrollo Social, responsable de las partidas de ayudas sociales.
Se manifiestaron contra lo que consideran un plan de ajuste vinculado al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la reducción de los planes sociales y para pedir más alimentos para comedores populares. Todo en un contexto de alta inflación, mientras un 39,2% de habitantes del país se encuentra debajo de la línea de la pobreza, según datos del segundo semestre de 2022.
La inflación, una certeza que no cesa
Cualquiera que viva en Argentina y consuma bienes y servicios aquí intuía –por no decir que sabía con certeza– lo que se confirmó el viernes con datos oficiales: la inflación sigue creciendo y en abril fue del 8,4%, superando la de marzo, que había sido de 7,7%, en una racha de aumentos sostenidos que comenzó en diciembre de 2022, cierre de ese año en que había oscilado entre el 3,9 y el 7,4% mensual.
Los datos son del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) del país, que también dio cuenta de que en los últimos doce meses la canasta de precios que mide aumentó un 108,8%. En abril los alimentos, como en muchos de los últimos meses, estuvieron entre los rubros que más subieron: 10,1%. Y se trata de un sector que impacta a todos los habitantes del país, pero sobre todo a los más pobres.
Desde el Ministerio de Economía reaccionaron el mismo viernes con el aviso de que habría un fuerte trabajo de la cartera durante el fin de semana y que en esos mismos días se anunciarían medidas para combatir la inflación, algo que ocurrió el domingo. La principal fue la subida de 6 puntos porcentuales de las tasas de interés, para llevarlas al 97% anual, luego de aumentarlas 10 puntos en abril e intentar así absorber pesos y quitarlos del consumo y la compra de dólares (en blanco o en negro).
Si se desacelera el consumo, uno de los efectos potenciales es que se enfríe la economía, así que para intentar contener ese coletazo, el Gobierno redujo el costo de financiar compras con tarjetas de crédito en 12 cuotas, anunció que simplificará las importaciones de bienes de capital e implementará una moratoria impositiva para micro, pequeñas y medianas empresas.
Cristina Fernández dijo que no otra vez, ¿entonces quién?
Mientras tanto, los sectores afines a la vicepresidenta Cristina Fernández siguieron insistiendo con el canto “Cristina presidenta, Cristina presidenta”, para convencerla de que se presente como candidata para las elecciones presidenciales de este año. Esta vez la súplica fue en el Congreso del Partido Justicialista, en el que ella no estaba presente, tampoco el presidente Alberto Fernández.
La vicepresidenta ya había asegurado públicamente, al menos en tres ocasiones, que no se presentaría y cuando terminó el encuentro lo volvió a decir. Cristina Fernández publicó en su sitio web y a través de sus redes sociales una carta en la que dijo que no sería candidata, señaló a la Justicia de intentar proscribirla –a ella y otros peronistas– y de operar para la oposición de Juntos por el Cambio. También llamó a “la construcción de un programa de gobierno que vuelva a enamorar a los argentinos y las argentinas y convencerlos de que un país mejor no sólo es posible sino que, además, es deseable”.
Es inusual que Cristina Fernández de entrevistas periodísticas. Pero lo hará este jueves en los estudios del canal ‘C5N’, donde conversará con Pablo Duggan. En sus últimas expresiones públicas tocó temas recurrentes, como la crítica al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, a la oposición y la insistencia en la idea de la proscripción.
Es posible que aborde los mismos asuntos. Lo que no está claro es que dé respuesta a la pregunta que apremia en el electorado que le es afín: ¿quién será candidato del oficialismo a la Presidencia?
En 2019, cuando ella anunció la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández lo hizo con un video a través de sus redes sociales. ¿Nombrará a alguien? ¿A través de qué medio? ¿O la interna se dirimirá en las Primaria Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 13 de agosto?
La persistente confirmación de la exjefa de Estado de que no participará se suma a los anuncios del actual presidente y de su antecesor y opositor Mauricio Macri de que tampoco serán candidatos –ellos sólo necesitaron decirlo una vez. Así que ni el actual mandatario ni sus dos antecesores se presentarán.
¿Comenzará un cambio generacional en las principales fuerzas políticas argentinas? No necesariamente, aunque sí habrá cambios de nombres. Los dos principales contendientes de Juntos por el Cambio, el partido de Macri, son su exministra de Seguridad Patricia Bullrich y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, no precisamente dos recién llegados a la política.
Los partidos y coaliciones tienen tiempo para presentar listas de candidatos para las PASO hasta el 24 de junio. Mientras tanto, sigue acechando a las dos principales coaliciones el nombre de Javier Milei, un libertario extremo en lo económico y conservador en lo social, que está concentrando el voto rechazo a la política tradicional, especialmente entre varones jóvenes.
Algunos lo ven como un ominoso llamado de atención que podría sorprender llegando a segunda vuelta, otros creen que su figura está sobredimensionada.
¿Qué pasa con las reelecciones?
El partido de Milei no tiene armado nacional y los candidatos que se aliaron a él en las provincias no han hecho buenas elecciones. Lo contrario está sucediendo con el Frente de Todos, que ha tenido exitosos resultados para reelegir gobernadores donde lo intentó. Ganó en La Rioja y Salta (noroeste), La Pampa (centro), y Tierra del Fuego (Patagonia).
Por una decisión de la Corte Suprema que generó polémica se postergaron las elecciones a gobernador de las provincias de San Juan (oeste) y de Tucumán (noroeste), previstas para el pasado domingo 14 de mayo, con el argumento de que los candidatos a gobernador o a vicegobernador no podían presentarse por los límites a la reelección que establecen sus Constituciones.
En ambos casos los cuestionados son oficialistas. Las de Tucumán se celebrarán finalmente el 11 de junio, luego de que se bajara de la boleta el gobernador actual, Juan Manzur, que iba como candidato a vicegobernador.
“El Loco” argentino desembarca en Uruguay
Finalmente, una noticia compartida entre Uruguay y Argentina: la selección nacional masculina de fútbol del primero anunció que su director técnico es Marcelo “El Loco” Bielsa, lo que cimienta la fama del último campeón del mundo como exportador de DTs.
Y ya que estamos con el fútbol, el 20 de mayo comienza el Mundial masculino Sub20, al que la albiceleste no había clasificado, pero del que forma parte luego de que la FIFA le quitara la organización a Indonesia y que Argentina se convirtiera en anfitrión. El equipo dirigido por Javier Mascherano debuta el mismo día 20 en Santiago del Estero frente a Uzbekistán.