El piloto español de Ducati protagonizó una caída brutal de la que afortunadamente salió ileso
La mala suerte de Jorge Lorenzo
La Ley de Murphy para Jorge Lorenzo. Si algo podía salir mal, le salió peor. El balear se fue al suelo en la segunda sesión de entrenamientos libres en Tailandia en una durísima caída en la que se golpeó varias veces en el pie derecho.
El accidente en Tailandia
El de Palma optó por viajar a Buriram y competir después de su accidente en Aragón, donde se luxó el dedo gordo del pie derecho y sufrió una fractura en el segundo dedo. El pentacampeón ya había salido en el primer libre, dando 19 vueltas, pero con precaución.
En esta segunda sesión, Jorge buscaba meterse entre los 10 mejores para garantizarse el acceso a la Q2. Pero, a falta de 15 minutos, el mallorquín se cayó en la frenada de la curva 3, a final de la recta de un kilómetro de longitud. Se le bloqueó de detrás y salió por orejas. Voló y cayó sobre su pierna derecha, golpeándose el maltrecho pie.
La evaluación médica
Lorenzo, nada más dejar de rodar, se miró su pie. Hasta quiso quitarse la bota. Fue subido a una camilla y, de ahí, en ambulancia, al centro médico. Su Ducati se rompió.
Posteriormente, Tardozzi, el jefe de equipo, dio novedades sobre el accidente. “No hay roturas, no hay fracturas”, tranquilizaba después de las primeras radiografías. “Ha sido un gran golpe. Hay que valorar si corre más. Es un luchador y creo que lo intentará”, añadía.
Lesiones y pronóstico
El doctor Charte, jefe de los servicios médicos del Mundial, detallaba sus lesiones. “Tiene una fuerte contusión en la muñeca izquierda y en el tobillo derecho. No apreciamos ninguna fractura, pero le voy a hacer un TAC en el hospital de Buriram para descartar algo en el escafoides. Está magullado. Ya venía lastrado, pero no son más que golpes. No está al cien por cien. Tras el TAC, veremos si le declaramos ‘apto’ o no. A nivel anímico, está tocado”, aseguraba.