La familia del escultor dominicano Salvador Vassallo inauguró la exposición individual del artista titulada, “Vassallo In Memoriam”, en la Quinta Dominica, ubicada en la Ciudad Colonial, para conmemorar el año que se celebraría su cumpleaños número 80.
Soledad de Vassallo, viuda del artista, expresó que, “esta In Memoriam, presenta una visión generalizada de cada una de las exposiciones individuales que realizó, con piezas inéditas, diferentes, exclusivas, surrealistas, figurativas, reales tratadas de una manera especial y espacial, que ahora les toca a ustedes descubrir cada etapa, y disfrutarla, como yo la he vuelto a disfrutar”.
De Vassallo menciono algunas de las piezas icónicas que se estarán exhibiendo en este espacio: Davinesca (de seria las Marchantas), Pitá (de la serie Los Cocolos), Pretor magnum (de la serie Los Pretorianos), de Cara Al Sol (acero), Figuración uno a los vente (materiales diversos), Búfalo de Agua (mármol), Monje Alado (de la serie Los Mojes)
La exposición Vassallo In Memoriam muestra parte el legado artístico de uno de los pocos escultores dominicanos multifacéticos, cuyo trabajo involucró una gran diversidad de materiales, como la madera, la piedra, el hierro, el acero, el mármol, el bronce entre otros.
La exhibición cuenta con 61obras así como también una muestra de dibujos y piezas nunca antes expuestas, en una diversidad de formatos, estilos y materiales, que hace un recorrido por las diferentes etapas y exposiciones de Vassallo, tanto individual como colectivo.
Las obras estarán expuestas al público hasta el 11 de noviembre en la Quinta Dominica de martes a viernes de 9:30 a.m. a 6 p.m. y los fines de semana 12 p.m. a 9 p.m.
Sobre Salvador Vassallo
El escultor dominicano Salvador Vassallo, nacido en el año 1944, ingresó en 1960 a la Escuela Nacional de Bellas Artes, donde recibió clases del profesor Gilberto Hernández Ortega. También fue alumno de pintura de la Escuela de Ada Balcácer y del Centro de Arte Cándido Bidó y de Antonio Prats Ventós. En 1971 se graduó en Diseño y Decoración de Interiores en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña. Realizó múltiples exposiciones individuales de esculturas tanto en República Dominicana como en el exterior y en sus obras plasma una diversidad de estilos, formas, técnicas y materiales, diversidad que siempre lo caracterizó.
El huracán David, tras su paso por la República Dominicana en el año 1979, fue un fenómeno de la naturaleza que marcó su entrada definitiva a la escultura, ya que la caída de árboles en las cercanías de su hogar, en el sector de le Esperilla, fueron el impulso para que el quisiera darle forma al tronco de una caoba que por muchos años cubría con su sombra y verdor la calle donde vivía; ahí nació “Davinesca”, su primera escultura en caoba y cobre.
Luna de Quisqueya, una obra en acero inoxidable de 25 pies de altura se encuentra en los jardines de la Universidad de Lowell (Massachussets, Estados Unidos). La misma fue adquirida por esa institución en 1996.
Muchas de sus piezas se encuentran en colecciones públicas y privadas de la República Dominicana, México, España, Estados Unidos e Israel.
