Un potente terremoto de magnitud 7,6 sacudió el norte de Japón la noche de este lunes 8 de diciembre de 2025, desencadenando una alerta de tsunami que movilizó a miles de residentes hacia zonas seguras. Por el momento, las autoridades no han reportado víctimas mortales ni daños estructurales de consideración.
La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) señaló que el fenómeno sísmico generó un riesgo de olas de hasta tres metros en varias áreas costeras, por lo que activó de inmediato los sistemas de alerta nacional. La institución pidió a la población mantenerse alejada del litoral y seguir las instrucciones de los equipos de emergencia.
De acuerdo con la agencia EFE, el sismo se registró alrededor de las 11:15 hora local y se sintió con especial fuerza en las prefecturas ubicadas al norte del país. La intensidad del evento alertó tanto a autoridades japonesas como extranjeras.
🚨🇯🇵 Las autoridades emiten orden de evacuación en Japón tras potente sismo que provocó alerta de tsunamihttps://t.co/S9rHOwe5sh https://t.co/oEzx8dyXvi pic.twitter.com/kNvKq9OFTc
— RT en Español (@ActualidadRT) December 8, 2025
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó que el epicentro se situó a unos 70 kilómetros de la costa japonesa y tuvo una profundidad aproximada de 53 kilómetros. Este comportamiento, según expertos, coincide con los patrones habituales de la actividad sísmica en el Cinturón de Fuego del Pacífico.
La ciudad de Hachinohe registró la mayor sacudida, alcanzando el nivel 6 superior en la escala sísmica japonesa, que mide el nivel de agitación en superficie. Este rango indica fuerte movimiento y un riesgo elevado de daños potenciales en estructuras vulnerables.
En las localidades de Oirase y Hashikami, la intensidad alcanzó el nivel 6 inferior, otro indicador de peligro significativo. Las autoridades locales han iniciado revisiones para descartar daños en viviendas y carreteras.
La cadena pública NHK informó que varias personas resultaron heridas en un hotel de Hachinohe tras la fuerte sacudida. Aunque no se ofrecieron detalles adicionales, los equipos de socorro se desplazaron con rapidez para asistir a los afectados.
El movimiento telúrico se sintió también en muchas zonas del país, incluyendo el centro y el este. En Tokio, la capital, se percibió con una intensidad moderada equivalente al nivel 2 de la escala japonesa, sin que se activaran alertas locales.
Ante el riesgo de tsunami, la JMA emitió una advertencia de olas de hasta tres metros para las costas de Aomori, Iwate y el extremo sur de Hokkaido. En estas zonas, los residentes fueron instruidos a desplazarse inmediatamente a zonas elevadas o refugios designados.
La primera ola registrada, de unos 40 centímetros, llegó al puerto de Mutsu-Ogawara alrededor de las 23:43 hora local. Minutos después, se detectó otra ola de tamaño similar en Urakawa, Hokkaido, confirmando la actividad marina asociada al evento sísmico.
También se activó una alerta menor —de hasta un metro de altura— para las prefecturas de Miyagi, Fukushima y áreas adicionales del sur de Hokkaido. Las autoridades advirtieron que incluso olas pequeñas pueden resultar peligrosas.
Ante la magnitud del riesgo, unas 23 000 personas fueron llamadas a evacuar de manera preventiva. La primera ministra, Sanae Takaichi, ordenó la conformación de un equipo especial de seguimiento y solicitó a las instituciones gubernamentales coordinar esfuerzos para garantizar la seguridad de la población.
Como parte de los protocolos de seguridad, la empresa Tohoku Electric Power inició revisiones en las plantas nucleares de Higashidori y Onagawa. Hasta el momento no se han detectado anomalías, un dato que genera alivio en un país marcado por experiencias pasadas con instalaciones nucleares.
En la hora siguiente al terremoto principal, se registraron varias réplicas, incluida una de magnitud 5,6. Las autoridades pidieron a la población mantenerse alerta, ya que las réplicas pueden continuar en las próximas horas y representar riesgos adicionales.

