Los 10 fallecidos por la estampida durante el concierto del rapero Travis Scott en el festival de música Astroworld, celebrado en Houston (Texas, EE.UU.) el pasado 5 de noviembre, murieron a causa de asfixia por compresión, comunicaron las autoridades, citadas por ABC News.
Un experto médico explicó que lo más probable es que la presión de la gran multitud en el evento fuera tan grande que rápidamente exprimió todo el aire de los pulmones de las víctimas, provocando que se desmayaran aproximadamente en un minuto y murieran porque los órganos vitales se quedaron sin oxígeno.
«Los segundos realmente cuentan para que una persona se recupere y sea rescatada de ese terrible suceso. Los órganos, como el cerebro y el corazón, empiezan a sufrir lesiones y, al cabo de tres o cuatro minutos esas lesiones son tan graves que no se puede salvar a la persona», agregó el doctor George W. Williams, anestesista de la UCI del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas.
La forma de las muertes se dictaminó como un accidente. La víctima más joven era Ezra Blount, de 9 años, mientras que los demás fallecidos tenían edades entre los 14 y los 27 años.
Los médicos forenses señalaron que los factores que contribuyeron a la muerte de un hombre fueron la cocaína, la metanfetamina y el etanol, una forma de alcohol.
Además, unas 300 personas resultaron heridas y fueron atendidas en el recinto del festival y 25 fueron trasladadas a hospitales.