La líbido o el deseo sexual puede verse modificada y alterada debido a el consumo de determinados alimentos que no contribuyen a su correcto funcionamiento. Por eso, para poder evitar este tipo de problemas, es necesario que se realice una dieta equilibrada rica en vitaminas, minerales, enzimas y otros nutrientes que favorecen la sexualidad.
Existen algunos alimentos que impactan directamente sobre el estrés y el estado anímico, y por esta razón la líbido puede verse afectada. El cuerpo humano está totalmente conectado entre sí, y por eso cualquier problema de salud que afecte a un órgano, directamente termina por afectar la calidad del deseo sexual.
Entre los alimentos que deben evitarse para que este tipo de deficiencias no ocurran está el café, debido a que reduce la producción de cortisol que es la hormona encargada de eliminar el estrés y activar el deseo sexual. Por otro lado, el azúcar refinado es otro enemigo de la actividad sexual porque si aumentan los niveles de glucosa, disminuye el deseo.
Las carnes rojas también disminuyen la líbido, ya que son grasas saturadas que elevan los niveles de colesterol y esto repercute en el deseo sexual. Por su parte, la comida alta en grasas, puede obstruir las arterias y alterar los niveles de azúcar en sangre produciendo pesadez y somnolencia, dos factores que alteran el deseo sexual.