El congresista Adriano Espaillat (D-NY) reafirma su apoyo a la aprobación de la Ley de Héroes enfatizando los $100 mil millones de dólares que dispone la misma para alivio en el alquiler de viviendas, ya que entre 19 y 23 millones de familias que alquilan en todo Estados Unidos corren el riesgo de ser desalojados antes del 30 de septiembre.
Durante una rueda de prensa, encabezada por el senador Charles Schumer, el congresista enfatizó que dicha Ley garantiza la seguridad alimentaria con un aumento del 15 % en el beneficio máximo de SNAP (cupones de alimentos) y fondos adicionales para programas de nutrición que ayudan a las familias a poner comida en la mesa.
Asimismo, apoya a los pequeños negocios fortaleciendo el Programa de Protección de Nómina para garantizar que llegue a las comunidades con servicios deficientes, organizaciones sin fines de lucro de todos los tamaños, tipos y responda de manera flexible a las pequeñas empresas al proporcionar $10 mil millones para subsidios de emergencia por Covid-19 a través del programa de Préstamos por Daños Económicos.
“La Ley además brinda un fuerte apoyo a nuestros héroes con casi $1 billón para los gobiernos estatales, locales, territoriales y tribales en primera línea que necesitan desesperadamente fondos para pagar a los trabajadores de la salud, la policía, bomberos, transporte, EMS, maestros y otros trabajadores vitales que nos mantienen seguro y están en peligro de perder sus trabajos”, dijo Espaillat.
“La Ley Héroes también establecerá un fondo de Héroes de $200 mil millones para garantizar que los trabajadores esenciales reciban un pago por riesgo”.
El congresista indicó que la Ley de Héroes pone dinero en los bolsillos de los trabajadores con una segunda ronda de pagos directos a familias de hasta $6,000 por hogar, nuevas medidas de protección de nómina para mantener a 60 millones de trabajadores conectados con sus empleos y extender el pago federal de $600 semanales por desempleo hasta el próximo enero.
Además de Espaillat, a Schumer se unieron miembros de la delegación de congresista de Nueva York, quienes expresaron su desacuerdo con el proyecto de ley propuesto por el Partido Republicano, del cual dicen que simplemente actúa como una “casilla de verificación” para el manejo de la pandemia del senador Mitch McConnell y el presidente Donald Trump y que no será aprobado ni en la Cámara de Representantes ni en el Senado.