Unos 279 establecimientos en el estado de NY (bares, restaurantes y bodegas), entre ellos varios propiedad de dominicanos en el Alto Manhattan, han perdido su licencia de licor por violar normas de COVID-19.
El gobernador Andrew Cuomo, ha calificado las violaciones de “atroces”. Asimismo, se han presentado 1,867 cargos contra bares y restaurantes en el estado, la mayoría establecidos en la Gran Manzana.
Decenas de dominicanos propietarios de estos establecimientos se han visto afectados, principalmente en los vecindarios de Inwood y Washington Heights, por violar el protocolo de salud.
Las empresas que violan las regulaciones de COVID-19 enfrentan multas de hasta $10 mil dólares, equivalente a más 580 mil pesos dominicanos.
Por su parte, el “Defensor del Pueblo” en NYC, Jumaane Williams, ante el drástico rebote del virus, demandó del gobernador Cuomo el cierre de todos los negocios que no sean esenciales, incluido el consumo en el interior y cierre de restaurantes, bares, salones de belleza, uñas, gimnasios y lugares de culto, entre otros.
En la Gran Manzana hay miles de quisqueyanos, entre otras etnias, propietarios de estos tipos de negocios.
Asimismo, Williams está demandando el apoyo financiero inmediato para las empresas locales que están cerradas.
Propuso coordinar cierres con Nueva Jersey y Connecticut para proteger a los residentes de NY que trabajan en esos estados y viceversa.
Además, exigir que todos los residentes usen mascarilla al salir de sus hogares y cuando estén en contacto con personas que no viven en su hogar.
Por Ramón Mercedes