El presidente Luis Abinader y la primera dama, Raquel Arbaje se comprometieron este martes a brindar todo el apoyo que se requiera para las cirugías reconstructivas a las que debe someterse la joven de 19 años, Yocairy Amarante, quien fue víctima de un atentado con el químico corrosivo conocido como acido del diablo.
La directora de Comunicaciones de la Presidencia de la República, Milagros Germán se comunicó con Diario Libre luego de que se publicara la conmovedora historia sobre la joven madre residente en el barrio Mejoramiento Social, en la que pide al primer mandatario atender su caso.
De igual forma, Cristal Acevedo, encargada de Prensa de la Primera Dama, Raquel Arbaje, dijo que esta tiene todo el interés de buscar una solución a la situación de Yocairy. Lo propio hizo el Gabinete de Políticas Sociales de la Presidencia.
“El presidente Luis Abinader y la primera dama, Raquel Arbaje, se comprometen a que la joven Yocairy Amarante reciba las cirugías reconstructivas necesarias para recuperarse. La escuchamos y resaltamos su valentía y la entereza de su alma”, expresó Milagros Germán.
A Yocairy Amarante, de 19 años de edad, la vida le hizo una mala jugada, cuando en septiembre pasado, por encargo de su expareja, Willy Antonio Javier Monegro, fue atacada con el acido del diablo, mientras se desplazaba en un carro de transporte público, en el sector María Auxiliadora del Distrito Nacional.
Yocairy permaneció por dos meses en la Unidad de Quemados del Hospital Ney Arias Lora en Santo Domingo Norte. El poderoso liquido le consumió su ojo derecho y del ojo izquierdo solo puede ver con dificultad o borroso, como ella misma lo expresa.
Ahora tiene casi un mes que fue dada el alta médica. La joven madre de una niña de dos años continúa recibiendo atenciones médicas interdiarias y los doctores auguran que, dependiendo de la evolución de la cicatrización de las quemaduras, podría ser sometida a otra operación reconstructiva.
Su sueño es que su niña pueda reconocerla, así como también volver a trabajar para mantenerla.
Su verdugo y expareja, Willy Antonio Javier Monegro guarda prisión preventiva en el 15 de Azua junto a los dos hombres que ejecutaron el hecho. Su madre y su hermano acuden a los procesos judiciales que se les siguen a los imputados.