El “Machistómetro”: el juego que ayuda a detectar relaciones violentas en Perú
El “Machistómetro” es un innovador juego de preguntas diseñado para que las mujeres identifiquen si están en una relación violenta que pone en riesgo su vida. Esta herramienta fue presentada por una reconocida organización feminista peruana con el respaldo de una empresa privada, buscando prevenir la violencia de género desde sus primeras señales.
Alarma por los feminicidios en Perú en 2019
En Perú se registraron 160 feminicidios durante 2019, la cifra más alta en la última década. Este dato refleja la gravedad de la violencia machista que, según defensores de los derechos de las mujeres, es el último eslabón de una cadena progresiva de agresiones.
“La violencia es progresiva y escalonada”, explicó a Efe Elga Prado, representante de la ONG Manuela Ramos. “Empieza con control y aislamiento de la pareja, seguido de dependencia emocional y económica, dejando a la mujer completamente aislada”.
Prado, quien también coordina el Programa de Sexualidad y Autonomía Física de Manuela Ramos, advirtió que “muchas mujeres que intentan romper estas relaciones tóxicas terminan siendo asesinadas”, consecuencia directa de la alarmante estadística de feminicidios.
Una alianza para prevenir la violencia machista
La organización feminista desarrolló el Machistómetro en colaboración con la empresa de belleza Avon, con el objetivo de crear un producto que ayude a detectar y prevenir la violencia machista desde sus primeras manifestaciones.
Esta iniciativa responde a una encuesta que revela que varios comportamientos violentos están normalizados en la sociedad peruana, dificultando su identificación y denuncia.
Identificando conductas violentas normalizadas
Un estudio encargado por Manuela Ramos a la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) mostró que el 42 % de una muestra de 2,400 personas no considera que la pareja revise el celular sea un acto de violencia. Este porcentaje aumenta al 59 % en la región selvática de Ucayali y al 58 % en la zona andina de Ayacucho.
“La población no percibe el control del celular o redes sociales como un primer eslabón de violencia”, afirmó Prado. Además, “más de la mitad de la gente sigue justificando la violencia contra las mujeres, lo que evidencia la necesidad de sensibilizar y educar”.
En este contexto, se creó el juego del Machistómetro como una herramienta educativa y preventiva.
Cómo funciona el Machistómetro
El juego de mesa consiste en responder 21 preguntas sobre un tablero con opciones “siempre”, “a veces” y “nunca”. Estas preguntas permiten identificar el grado de violencia en la relación.
Los interrogantes abordan desde el control sobre la vestimenta, la irritación por salir con amigos, el monitoreo de redes sociales, hasta insultos, prohibiciones para trabajar o estudiar, agresiones físicas y coerción sexual.
Reflexión y autoconocimiento para romper el ciclo
Al completar el Machistómetro, muchas mujeres reconocen que también ejercen conductas controladoras, lo que puede generar relaciones tóxicas y recíprocas. “Este juego les permite reflexionar sobre sus propias prácticas y cuestionar si están en una relación violenta que avanza progresivamente”, señaló Prado.
Desde su lanzamiento en noviembre, el juego ha alcanzado a miles: 7,550 personas han jugado la versión en línea, se han distribuido 21,500 juegos en formato papel y otras 750 en versión de mesa, según informó a Efe Mabel Barreto, responsable de Comunicaciones de Manuela Ramos.
El objetivo es llegar a más de 44,000 mujeres beneficiarias de los programas de la ONG y presentar un primer balance cerca del 8 de marzo, fecha en que se conmemora el Día Internacional de la Mujer.
El desafío de la denuncia en casos de violencia
Barreto destacó una encuesta nacional reciente que reveló que el 71 % de las mujeres maltratadas en Perú no denuncian los abusos. Las razones principales son que no consideran importante denunciar (47,8 %) o sienten vergüenza (14,7 %).
“Este panorama debe cambiar porque todas las mujeres tienen derecho a una vida libre de violencia. El feminicidio es solo el último eslabón de una cadena de agresiones que debe romperse”, enfatizó Barreto.
El Machistómetro se presenta así como una herramienta clave para la prevención y detección temprana de la violencia machista en Perú, impulsando la reflexión y el empoderamiento femenino.
Crédito: Diario Libre