Los deslizamientos de tierra causaron el desplome de cuatro negocios y una habitación de viviendas que fueron a parar a una casa club en construcción que desde el pasado año levantaba el Fondo Patrimonial para las Empresas Reformadas.
Los derrumbes amenazan además dos locales comerciales que prácticamente quedaron en el aire en el tramo La Cumbre en la carretera turística Gregorio Luperón.
El desplome afectó un colmado, una barbería, una banca de lotería y una habitación de alquiler, propiedad de un hombre que reside en los Estados Unidos.
Los escombros fueron a parar a la Casa Club que construye el Fonper y cuyos trabajos están paralizados.
Los moradores de la comunidad dicen las lluvias registradas en los últimos días afectaron la zona que de por si es vulnerable por la falla de la cordillera septentrional.
Un equipo del Ministerio de Obras Públicas acudió a la zona para evaluar los daños.
Gerardo Valerio, propietario de la parada El Gordo, establecimiento que corre el riesgo de desplomarse considera urgente la construcción de muros de gaviones.