Ha causado alarma en varias comunidades del municipio de Baitoa, provincia de Santiago, el abandono de un ataúd con el cadáver de un hombre que presuntamente falleció por Coronavirus. El ataúd fue dejado frente al Cementerio de la entrada de la localidad López.
El cuerpo correspondía a Rafael (Rafelo) Fernández, quien de acuerdo a familiares, fue ingresado hace una semana en el hospital regional José María Cabral y Báez de Santiago, con síntomas característicos del Covid19.
Pobladores dicen que una ambulancia de Salud Pública llegó al lugar y que dejó el cajón con el muerto en plena carretera frente al camposanto y que sus ocupantes se marcharon de inmediato.
Personas de la zona tildan de irresponsables al personal del Ministerio de Salud Pública que trasladó y abandonó el cadáver. Otros residentes indican que fueron los familiares del fenecido que tomaron la decisión, “para no contaminarse”.
Ayuntamiento ordena sepultura
El reelecto alcalde de Baitoa, Bernardo López, dispuso que brigadas del Ayuntamiento y un miembro de la Cruz Roja Dominicana sepultaran el cuerpo sin vida del hombre.
Lo enterraron en una fosa de tierra y en su despedida solo se encontraba el zacateca, dos empleados del cabildo y un socorrista.
“Que pena que no pude dar el último hasta luego a mi primo, se fue por coronavirus, tan bueno que eras con todo el mundo”, dijo su prima Carmen Núñez.
Mientras que un agricultor dijo al Listín Diario que el coronavirus está insensibilizando a las personas y mencionó que no pudo ir al sepelio de su gran amigo Rafael (Rafelo) Fernández, porque se lo prohibieron.
Personas de las comunidades cercanas a donde vivía Fernández lo definieron como un ser humano servicial, trabajador y que siempre estaba al servicio de los demás.