Santo Domingo – La Coalición para la Defensa de las Áreas Protegidas, un colectivo de organizaciones ambientales en la República Dominicana, ha sumado su voz a las crecientes demandas de miles de campesinos y comunidades de Bonao y otras localidades del país para detener la explotación indiscriminada del río Yuna. Este esfuerzo busca proteger uno de los recursos hídricos más importantes de la isla.
Entre las instituciones que conforman la coalición se encuentran la Academia de Ciencias de la República Dominicana, la Comisión Ambiental de la UASD, la Fundación Acción Verde Inc., la Sociedad Ecológica del Cibao, Inc. (SOECI), la Fundación Moscoso Puello, Guaikia Ambiente, la Federación de Campesinos hacia el Progreso, la Fundación de Derecho, Defensa y Educación Ambiental de la República Dominicana (FUDDEA-RD), y el Grupo Jaragua.
Estas organizaciones han expresado su preocupación por la depredación de la cuenca del río Yuna, advirtiendo que de continuar el curso actual de explotación, este vital recurso hídrico corre el riesgo de desaparecer en un futuro cercano. Con más de 200 kilómetros de recorrido y una cuenca de 2,900 kilómetros cuadrados, el río Yuna es esencial para el 60% de la producción agrícola del Cibao central y más de la mitad de la producción hidroeléctrica del país.
Las instituciones han señalado que los bosques de montaña que sustentan el río han estado bajo constante asedio debido a actividades agrícolas, ganaderas, mineras e inmobiliarias que no respetan las normas de uso del suelo. Esta situación ha reducido significativamente la cobertura boscosa, lo que pone en peligro la sostenibilidad del río.
Propuestas de Acción:
- Regulación Estricta: Mayor regulación en los usos permitidos en la zona de captación de agua de las montañas de la cordillera central.
- Detener la Deforestación: Implementar medidas urgentes para detener la deforestación y proteger los reductos de bosques restantes.
- Creación de Áreas Protegidas: Establecer una nueva área protegida que abarque los parques nacionales que rodean al río, asegurando su preservación.
Finalmente, la coalición destacó la importancia de darle al río Yuna un trato prioritario en las políticas públicas para su protección. Instaron a tomar acciones urgentes que involucren a las familias que aún habitan en la parte alta de la cuenca, quienes podrían convertirse en guardianes y protectores del río, tal como lo ha hecho la Federación de Campesinos hacia el Progreso durante décadas.
