Así lo determinó la investigación más amplia hecha hasta el momento sobre los beneficios del aguacate en la salud cardiovascular. Las conclusiones se publicaron la revista de la Asociación Americana del Corazón
En muchos casos, la alimentación es la primera medicina contra el colesterol elevado. Los hábitos cotidianos impactan con fuerza en la salud del corazón. Las enfermedades cardiovasculares son responsables de un tercio de las muertes a nivel global y muchas pueden prevenirse ya que el riesgo de padecerlas se incrementa al seguir una dieta poco balanceada, fumar, tomar alcohol o ser sedentario.
La presión arterial y el colesterol alto son dos de las condiciones más comunes que suelen afectar a las personas con exceso de peso o mala alimentación. Y son, principalmente, factores de riesgo de la salud del corazón en el mediano o largo plazo si no se sigue un tratamiento médico.
Por eso, prestar atención a qué comemos cada día es fundamental: un pequeño hábito culinario puede provocar grandes beneficios. El poder de las “grasas buenas” de la palta es una fórmula sencilla y accesible para mejorar la salud cardiovascular.
Recientenme, un estudio del que participaron investigadores de cinco universidades señaló que comer una palta o aguacate al día durante seis meses condujo a una ligera disminución en los niveles de colesterol no saludables.
Además, derribaron el mito de que la palta engorda, al observar que la incorporación diaria de esta fruta no tuvo efecto sobre la grasa abdominal, la grasa hepática o la circunferencia de la cintura en personas con sobrepeso u obesidad. En un ensayo aleatorizado, el equipo también encontró que los participantes que comían palta tenían dietas de mejor calidad durante el período de estudio.
Si bien estudios anteriores más pequeños habían encontrado una relación entre comer esta fruta y un menor peso corporal, índice de masa corporal (IMC) y circunferencias de la cintura, este fue el estudio más grande y extenso hasta la fecha sobre los efectos de las paltas en la salud, incluido el gran número de participantes y la duración del trabajo.
Entre las conclusiones publicadas en el Journal of the American Heart Association, los autores observaron que “la incorporación de un aguacate por día en este estudio no provocó un aumento de peso y también provocó una ligera disminución del colesterol LDL, que son hallazgos importantes para una mejor salud”, señaló Kenny Kris-Etherton es profesora de ciencias nutricionales de la Universidad Evan Pugh en Penn State.
Kristina Petersen, profesora asistente de ciencias de la nutrición en la Texas Tech University, precisó que “el estudio también encontró que comer aguacates a diario mejoró la calidad general de las dietas de los participantes en ocho puntos en una escala de 100 puntos”.
“La adherencia a las Pautas Alimentarias para los Estadounidenses es generalmente deficiente en los EEUU, y nuestros hallazgos sugieren que comer un aguacate por día puede aumentar sustancialmente la calidad general de la dieta -destacó Petersen-. Esto es importante porque sabemos que una dieta de mayor calidad se asocia con un menor riesgo de varias enfermedades, incluidas las enfermedades cardíacas, la diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer”, señaló la especialista.
La investigación se realizó en conjunto con la Universidad de Loma Linda, la Universidad de Tufts y UCLA, con el apoyo de coordinación de la Universidad de Wake Forest.
Por otro lado, la Asociación Estadounidense del Corazón, había afirmado con anterioridad que “el cuerpo necesita la grasa para aumentar la energía, proteger los órganos, producir hormonas y ayudar a la absorción de nutrientes.”
Las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas son las opciones más saludables para el corazón. Se las encuentra en el aceite de oliva, el aceite de canola, el aceite de maní, el aceite de cártamo y el aceite de sésamo, junto con la palta, la mantequilla de maní y varios frutos secos y semillas.
El estudio
Para la investigación, los investigadores realizaron un seguimiento de seis meses en el que participaron más de 1.000 participantes con sobrepeso u obesidad. A la mitad de los voluntarios se les indicó que comieran una palta todos los días, mientras que la otra mitad continuó con su dieta habitual y se les dijo que redujeran su consumo de palta a menos de dos por mes.
Las grasas buenas de la palta están asociadas al descenso del colesterol y un mejor perfil de grasas en sangre que colabora en la prevención cardiovascular (Getty)
La grasa en el abdomen y alrededor de otros órganos se midió con precisión en todos los participantes mediante resonancia magnética antes y al final del estudio.
Joan Sabaté, profesor de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Loma Linda, analizó que “si bien un aguacate al día no condujo a mejoras clínicamente significativas en la grasa abdominal y otros factores de riesgo cardiometabólicos, consumir un aguacate al día no resultó en un aumento de peso corporal”.
Para él, “esto es positivo porque comer calorías adicionales de los aguacates no afecta el peso corporal ni la grasa abdominal, y reduce ligeramente el colesterol total y el LDL”.
También encontraron que las paltas diarias dieron como resultado una disminución del colesterol total de 2,9 miligramos por decilitro (mg/dL) y una disminución del colesterol LDL de 2,5 mg/dL.
Los investigadores, que en el futuro continuarán analizando los datos del estudio, planean ahondar, por ejemplo, en cómo conviene comer las paltas todos los días, así como investigar cómo los participantes incorporaron las paltas en su dieta y si se observan diferencias en los resultados en función de cómo los participantes las comieron.