Wilson Rosa: No hay ARS, solo “administradoras de riesgos financieros”
El presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), Wilson Roa, ha denunciado que los nuevos centros de salud inaugurados por el presidente Danilo Medina carecen de equipamiento, personal técnico y materiales e insumos.
Roa Familia ha afirmado que en la República Dominicana no existe un sistema de salud, sino más bien un sector controlado por grupos financieros.
Falta de planificación en la reparación de centros hospitalarios
El presidente del CMD ha criticado la falta de planificación en la reparación de 57 centros hospitalarios, lo cual ha tenido un impacto negativo en el sector salud y en la población en general.
Según Roa Familia, la inversión en la rehabilitación de hospitales debe ir acompañada de una planificación adecuada, equipamiento, insumos y personal calificado para brindar un buen servicio.
Deficiencia de personal calificado y falta de sustitución
Roa Familia ha señalado que la falta de personal calificado en los centros de salud del Estado se debe en parte a la jubilación de más de 6,000 servidores, incluyendo 1,756 médicos, que no han sido sustituidos en su mayoría.
El presidente del CMD ha destacado la grave deficiencia de médicos en hospitales, como el caso de la Maternidad de Los Mina que solo cuenta con un cardiólogo y el hospital de Las Matas de Farfán con solo dos anestesiólogos.
Administradoras de riesgos financieros en lugar de ARS
Según Wilson Roa, las Administradoras de Riesgos de Salud en la República Dominicana son en realidad administradoras de riesgos financieros, ya que buscan minimizar los costos y maximizar las ganancias a expensas de la calidad de la atención médica.
El presidente del CMD ha denunciado que las ganancias de estas administradoras ascienden a cientos de millones de pesos, mientras que los pacientes y médicos enfrentan dificultades.
Roa Familia ha criticado el poder financiero en el sector salud y ha lamentado que se prioricen los intereses económicos sobre la asistencia médica de calidad que la población merece.
