Por Bartolo García
Cada cuatro años, la atención de Estados Unidos se centra en los llamados ‘swing states’, o estados péndulo, que tienen el poder de definir el resultado de la elección presidencial. En 2024, siete estados se perfilan como cruciales en la contienda electoral, influenciando quién será el próximo presidente.
Los siete estados que pueden decidir la elección
Para las elecciones de 2024, los estados considerados como indecisos son: Georgia, Arizona, Wisconsin, Michigan, Pensilvania, Nevada y Carolina del Norte. Estos estados no muestran una clara inclinación hacia el Partido Demócrata o el Partido Republicano, lo que los convierte en zonas de gran competencia electoral.
La carrera en estos estados suele ser reñida, y los márgenes de victoria son estrechos, lo que hace que la batalla por sus votos sea crucial. En el sistema electoral de EE. UU., el candidato que gana en un estado obtiene todos los votos de los delegados de ese estado, un proceso que puede llevar a que un candidato con menos votos a nivel nacional gane la presidencia.
Importancia histórica de los estados péndulo
La atención en los estados péndulo no es nueva. En 2016, por ejemplo, Hillary Clinton ganó casi tres millones de votos más que Donald Trump a nivel nacional, pero perdió la elección porque Trump logró obtener más votos en los estados clave que determinaban el resultado electoral.
Los estados que otorgan un mayor número de votos electorales, como Pensilvania con 20 y Texas con 38, son vitales para cualquier candidato. Los swing states, a menudo, representan un gran número de esos votos, lo que los convierte en objetivos principales para las campañas políticas.
Variaciones en la lista de estados péndulo
Cada elección presenta una lista diferente de estados péndulo. En 2024, se identifican siete, a diferencia de los nueve de hace cuatro años. Los estados en disputa son aquellos donde los márgenes de votación son estrechos y han favorecido a ambos partidos en diferentes elecciones. Desde 1992, un número significativo de estados ha cambiado su preferencia política al elegir a candidatos de diferentes partidos.
Para este año, se han considerado los resultados de las elecciones anteriores: los estados que votaron por Joe Biden en 2020 y los que eligieron a Trump en 2016 son clave. Biden ganó en seis de los siete estados péndulo en 2020, pero los márgenes de victoria fueron mínimos, lo que indica que el apoyo podría cambiar.
Las estrategias de campaña en los estados decisivos
Con siete estados cruciales en juego, los candidatos están intensificando sus esfuerzos en estas regiones. Kamala Harris, actual vicepresidenta y candidata demócrata, y Donald Trump, expresidente y candidato republicano, están llevando a cabo una campaña agresiva, organizando mítines y utilizando recursos estratégicos para atraer a los votantes indecisos.
Enfoque en Arizona
Arizona, que eligió a Biden en 2020, ha sido tradicionalmente un bastión republicano. Con 11 votos electorales en juego, la inmigración es un tema central en la campaña, especialmente después de un aumento en los cruces fronterizos. Trump ha prometido realizar la “mayor deportación en la historia de EE. UU.” si regresa a la Casa Blanca, mientras que Harris advierte que tal política sería un peligro para el país.