En el estado de California, al menos 6,5 millones de residentes están en alerta debido a las tormentas de nieve inusualmente intensas que han azotado la región en los últimos días. Estas tormentas han dejado a miles de personas sin electricidad y han hecho que los viajes en la zona de Sierra Nevada sean prácticamente imposibles.
El Centro de Predicción Meteorológica ha descrito las nevadas como “extremadamente intensas”, con acumulaciones de 5 a 15 centímetros por hora. Además, los vientos asociados, que en ocasiones han superado los 160 kilómetros por hora, están contribuyendo a mantener condiciones de viaje peligrosas en Sierra Nevada.
Se ha emitido una advertencia sobre el riesgo de avalanchas “extremas” que persistirá hasta el domingo por la tarde en áreas como la Sierra Central y el Gran Lago Tahoe, en la Montaña Oeste de California.
Las intensas nevadas han provocado el cierre de un tramo de 113 kilómetros de la carretera interestatal 80, cerca de la frontera con el estado de Nevada, después de que varios conductores quedaran varados el viernes por la noche.
Más de 40.000 personas han perdido el suministro eléctrico debido a las condiciones meteorológicas, según datos del monitor PowerOutage.us. Además, muchas pistas de esquí cerraron el sábado y algunas aún permanecen cerradas hoy.
Se espera que la tormenta disminuya su intensidad hacia el final del domingo, pero el lunes se espera la llegada de un nuevo sistema meteorológico, según ha informado el servicio meteorológico local.