El icónico empresario de espectáculos, Félix Cabrera, quien montó alrededor de 50 presentaciones bajo la dirección musical del fallecido Johnny Pacheco, pidió ayer martes que se erijan estatuas en su honor en Nueva York y Santiago de los Caballeros, República Dominicana para que su memoria permanezca en la historia como el más grande maestro y creador del género salsero en el mundo.
También sugirió que se le ponga el nombre a una escuela pública y una escuela de música.
“No era boricua y llevaba la salsa en la sangre”, explicó.
Cabrera, quien relató la excelencia y cercanía de su relación profesional y personal con Pacheco, dijo que, junto al entonces su socio, el productor boricua fallecido Ralph Mercado, presentaba los más grandes espectáculos de salsa en Nueva York y otros estados que tenían como figuras principales a Pacheco y la cubana Celia Cruz, también fallecida.
Recordó la época de oro de los multitudinarios conciertos en el Madison Square Garden y el emblemático Copacabana en Manhattan.
Señaló que en ese entorno descollaban José Alberto (El Canario), los cronistas Roberto Gerónimo y Jessie Ramírez y los recordados locutores Polito Vega y Paco Navarro.
“Nuestra relación se mantuvo por más de 30 años”, explicó Cabrera.
“Siempre fue simpático, sencillo, sonriente y humilde que no parecía que era el músico mundialmente conocido como constructor de La Fania All Star junto a Jerry Masucci”, narró el empresario.
“Pacheco fue el maestro y creador de la salsa, por lo que debe hacérsele un reconocimiento grande con una estatua y su nombre en escuelas y parques de Nueva York y otra efigie en Santiago de los Caballeros, su pueblo natal”, añadió.
Cabrera, precisó que “¿quién fue más grande que Johnny Pacheco, trabajando con todos los grandes?”.
Pacheco estuvo en tarima contratado por Cabrera en todos los festivales de la salsa que se producían en Nueva York.
“Masucci, Ralph Mercado, Polito Vega, Paco Navarro y yo, éramos las gentes que estábamos envueltos siempre en el negocio de Pacheco”, agregó.
Dijo que por la cercanía que mantuvieron, la muerte de Pacheco lo ha impactado muy fuerte.
“A mí me gusta todo tipo de música, pero me crié en Nueva York bailando salsa en los clubes más importantes de la ciudad”, relató.
“Son muchas historias que no las tengo en la mente ahora. Estuve cinco años manejando el Copacabana”, contó Cabrera.
El tiempo que estuvo en el Copacabana, mantuvo a Pacheco como orquesta planta y primera figura de los espectáculos que se presentaban en el histórico club nocturno.
“Pacheco era una persona que con el carisma y el talento que tenía, era un maestro en todo el sentido de la palabra. Donde se hablaba de Fania, donde estaban Celia Cruz, Ismael Miranda, Cheo Feliciano, Héctor Lavoe, Adalberto Santiago, Bobby Valentín, Larry Harlow, Ray Barretto, Joe Bataan, Willie Colon, Monguito, Louie Ramirez, Ralph Robles, Mongo Santamaría y Bobby Valentín, entre muchos otros, era siempre un espectáculo de multitudes”, sostuvo Cabrera.
“Antes de que Romeo Santos reventara el estadio de los Yankees, en 1973, Ralph Mercado produjo un concierto de salsa que copó todos los asientos. Fue la única vez que los latinos reventaron ese estado con el concierto de la Fania”, recordó.
“Eso era Grandes Ligas en el mundo entero donde quiera que se presentaba la Fania creada y dirigida por Pacheco”, anexó Cabrera.
Dijo que cuando produjo el espectáculo del 60 aniversario del Copacabana con Pacheco a la cabeza, que incluyó a Fernando Villalona, El Canario y otros numerosos artistas y grupos, fue tan extraordinario que hubo que cerrar las calles aledañas.
Cabrera también produjo un disco titulado “Los 60 Años del Copacabana” para su sello discográfico.
“Cuando se habla de música en Nueva York, nadie tiene más historia que yo”, dijo.
Por Miguel Cruz Tejada