Los muertos tras un atentado suicida contra una mezquita chiita en Kandahar ascendieron al menos a 32, mientras que 68 son los heridos, según la agencia de noticias gubernamental Bakhtar.
“Funcionarios del Emirato Islámico de Afganistán en Kandahar han dicho que 32 personas perdieron la vida y más de 68 resultaron heridas después de que se produjeran tres explosiones consecutivas en el interior de la mezquita del Imam Bargah (chií) en el primer distrito policial de la ciudad de Kandahar esta tarde”, dijo la Agencia de Noticias Bakhtar en Twitter.
La Misión de la ONU en Afganistán había dicho anteriormente que las explosiones fueron el resultado de un ataque suicida y había advertido que “los responsables deben rendir cuentas”.
“El terrorismo continúa en #Afganistán con al menos 30 muertos y decenas de heridos en un ataque suicida en la mayor mezquita chiita de #Kandahar a la hora de la oración del viernes. La ONU condena la última atrocidad contra una institución religiosa y sus fieles. Los responsables deben rendir cuentas”, publicó en su cuenta de Twitter la Unama.
Más temprano, un médico del hospital de Kandahar le había dicho a CNN que eran al menos 16 los muertos y 32 los heridos después de que una explosión golpeara una mezquita chiita durante las oraciones de este viernes.
El portavoz del Ministerio del Interior dirigido por los talibanes, Qari Saeed Khosty, confirmó la explosión en Twitter y dijo que varias personas murieron y otras resultaron heridas.
El médico, que prefirió permanecer en el anonimato por razones de seguridad, se encuentra en el hospital de Mirwais donde se atiende a los pacientes.
La semana pasada, la explosión de un atacante suicida en otra mezquita chiita en la ciudad de Kunduz, en el norte de Afganistán, dejó decenas de muertos y heridos.
El ISIS-K reivindicó la autoría de la explosión de Kunduz, según un comunicado difundido por la rama mediática del grupo, Amaq, así como de otro atentado perpetrado varios días antes en una mezquita del centro de Kabul.
El grupo terrorista lanzó una serie de ataques desde que los talibanes tomaron el control de Afganistán hace dos meses. Otros incluyen un ataque suicida en el aeropuerto de Kabul en agosto y una serie de atentados contra miembros de los talibanes en la ciudad oriental afgana de Jalalabad.
