Bartolo García
Santo Domingo, R.D. – El presidente Luis Abinader respondió de forma tajante a las críticas emitidas por Amnistía Internacional sobre las deportaciones de haitianos en República Dominicana, en el marco de una reunión sostenida este viernes con el expresidente Hipólito Mejía y miembros del Consejo Económico y Social (CES).
El mandatario expresó que “la República Dominicana seguirá actuando conforme a su Constitución y sus leyes migratorias”, y rechazó categóricamente los señalamientos que acusan al país de violar derechos humanos por su política de repatriaciones. “Que se vayan a luchar contra las bandas en Haití. Aquí estamos cuidando a nuestro país”, afirmó con vehemencia.
Durante la reunión celebrada en la residencia del exmandatario Mejía, se discutieron los avances de las comisiones técnicas que abordan temas estratégicos relacionados con la crisis haitiana, tales como migración, seguridad, comercio y comunicación. El presidente calificó el encuentro como “muy productivo” y resaltó el nivel de consenso que se está construyendo en torno a este tema nacional.
“Estamos trabajando en armonía con los demás expresidentes. Se trata de una política de Estado, no de un gobierno. Aquí lo que está en juego es la soberanía, la seguridad y el bienestar del pueblo dominicano”, sostuvo Abinader.
El jefe de Estado también informó que se ha convocado una reunión ampliada para el 23 de julio en el Palacio Nacional, donde se conocerán las conclusiones de las distintas comisiones técnicas, con miras a definir una estrategia nacional unificada.
El presidente insistió en que la comunidad internacional ha abandonado a Haití y ha sido omisa ante una crisis que se agrava día tras día. “Es muy fácil opinar desde afuera sin asumir ninguna responsabilidad. La República Dominicana ha sido el país más solidario con Haití, pero también tenemos que proteger nuestro territorio”, agregó.
En ese contexto, Abinader reiteró su rechazo a los recientes cuestionamientos de Amnistía Internacional, señalando que sus declaraciones reflejan una falta de comprensión sobre la magnitud del problema. “No tienen autoridad moral para juzgarnos cuando han sido indiferentes ante el colapso del Estado haitiano”, aseveró.
El mandatario también agradeció la disposición de los expresidentes Leonel Fernández y Danilo Medina para colaborar en la construcción de una política común. Dijo que este consenso es fundamental para mantener la estabilidad interna y enfrentar los desafíos geopolíticos actuales.
Por su parte, el expresidente Hipólito Mejía respaldó la postura del Gobierno y subrayó la importancia de actuar con firmeza frente a la crisis vecina. “El país no puede ceder a presiones externas cuando lo que está en juego es su futuro y su soberanía”, manifestó.
La reunión forma parte de una serie de consultas que el presidente Abinader ha sostenido con sectores políticos y sociales desde mayo, con el objetivo de generar una respuesta consensuada ante los efectos del colapso institucional de Haití en territorio dominicano.
Organismos internacionales y algunas ONG han criticado reiteradamente la política de deportaciones, alegando violaciones a los derechos humanos. Sin embargo, el Gobierno dominicano sostiene que actúa bajo el marco legal vigente y en defensa del interés nacional.
El presidente concluyó asegurando que “ningún organismo internacional puede imponerle a la República Dominicana cómo manejar su migración. Lo que necesitamos es apoyo real para enfrentar un problema que no es solo nuestro, sino de toda la región”.