El senador francés Joël Guerriau fue acusado formalmente este viernes por un juez y puesto bajo control judicial por los cargos de suministrar una droga a una diputada con el objetivo de asaltarla sexualmente y de posesión de narcóticos.
Guerriau, que había sido detenido el jueves por la Policía Judicial, fue presentado este viernes ante un tribunal que decidió abrir un proceso y acusarlo, según informó su abogado, Rémi Pierre Drai, en un comunicado enviado a la prensa.
En concreto, la acusación es por «administrar a Sandrine Josso sin su conocimiento una sustancia capaz de alterar su discernimiento o el control de sus actos, a fin de cometer una violación o una agresión sexual».
El senador está también acusado de «posesión y uso de sustancias estupefacientes», añadió el abogado.
Fuentes de la Fiscalía indicaron a medios locales que el control judicial es muy ligero, ya que solo incluye la prohibición de contactar con la víctima y de la obligación de someterse a tratamiento, por lo que el senador estará en libertad.
Los cargos de los que se acusa a Guerriau pueden suponer una condena máxima de cinco años de prisión y una multa de hasta 75.000 euros (81.868 dólares).
La decisión judicial se produjo después de un careo de dos horas entre el senador y la diputada Josso en una comisaría de Policía de París.
La diputada denunció que visitó la vivienda del senador en la noche del martes para cenar y que, tras beber un vaso de agua que le ofreció su anfitrión, se sintió mareada y con un elevado ritmo cardíaco.
Josso, sospechando algo extraño, abandonó rápidamente la vivienda y acudió a la Asamblea Nacional, donde solicitó ayuda médica y posteriormente fue trasladada a un hospital, donde los análisis determinaron la presencia de éxtasis en su organismo, tras lo cual presentó una denuncia.
La Policía Judicial acudió el miércoles a la vivienda del senador, donde hallaron éxtasis, por lo que los agentes procedieron a detenerlo. Este viernes, al concluir el período de 48 de detención provisional, fue presentado ante el juez.
Guerriau se declara inocente y asegura que jamás quiso hacer daño a Josso, que es amiga suya «desde hace mucho», y está convencido de demostrar que todo se debió a «un error de manipulación» de la sustancia, según su abogado.
Joël Guerriau, de 66 años, es senador independiente (aunque adscrito al partido de centroderecha Horizons) desde 2011 por el departamento de Loira Atlántico (oeste) y actualmente es vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, Defensa y Fuerzas Armadas de la Cámara Alta Francesa.
Josso, de 48 años, es diputada por ese mismo departamento desde 2017, primero con el partido macronista LREM y desde 2020 por el centrista MoDem.