En un discurso de casi 10 minutos, durante la misa de cuerpo presente del ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Orlando Jorge Mera, el presidente Luis Abinader habló de la tristeza que enluta su gobierno y al país, ante el asesinado de un amigo.
En sus declaraciones el mandatario resaltó que a diferencia de la familia de Jorge Mera, él no podía perdonar a Miguel Cruz, señalado como el responsable de este crimen.
“La familia, una familia de profundas raíces católicas, incluso para hacer un cierre nos dicen que perdonan al asesino. En mi caso, yo espero que Dios lo perdone”, dijo el presidente.
Abinader dijo que en estos momentos de tristeza había que continuar con las responsabilidades que abarcan ser funcionario público.
“Pero sí, nosotros tenemos que continuar, continuar con nuestra responsabilidad ejerciendo el Gobierno con fortaleza, con transparencia, con eficiencia, pero advirtiendo que estos cambios que se han dado durante estos años, conllevan muchos retos y peligros”, señaló.
El presidente resaltó, además, que servir desde una institución del Estado no era un privilegio, sino más bien un compromiso en el que se encuentran muchos peligros.
Expresó que a pesar de que en los próximos días continuarán las lágrimas y la aceptación del crimen de Orlando Jorge Mera, “vamos a seguir hacia delante, vamos a continuar con el Gobierno, con la circunstancias, con los momentos difíciles internacionales para seguir cumpliendo con el pueblo”.
Reiteró la importancia de contribuir a la eliminación de la violencia que vive el mundo a través de políticas públicas que contribuyan a este hecho.
“Que Dios lo tenga en su gloria y nosotros siempre lo tendremos en nuestros recuerdos y en nuestras oraciones”, concluyó Abinader.
El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales fue asesinado en su despacho la tarde del lunes, por una persona que de acuerdo a su familia era su amigo de infancia, el señor Miguel Cruz.
Sus restos están siendo velados en la Funeraria Blandino de la capital dominicana. El miércoles será trasladado a las instalaciones del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y luego llevado al cementerio Puerta del Cielo donde será sepultado.
