Estonia se convirtió en el primer país del mundo cuyos dos líderes máximos, elegidos por el voto, son mujeres. Si bien Nueva Zelanda, Barbados y Dinamarca tienen cabezas de estado femeninas, en sus casos una de ellas es monarca. En cambio, la presidenta Kersti Kaljulaid y la prima ministra Kaja Kallas son ambas decisión de los estonios.
En 2016 Kalijulaid asumió como la primera presidenta del país, desde su independencia en 1991. Y Kallas juró el martes 26 de enero luego de que el Partido Reformista, de centro derecha, al que pertenece, llegara a un acuerdo con el Partido del Centro, de tendencia más social, de Kalijulaid. El primer ministro anterior, Jüri Ratas, cayó con su gobierno el 13 de enero debido a un escándalo de corrupción: la presunta donación que recibió un funcionario a cambio de un favor en la regulación de la propiedad inmobiliaria en el distrito portuario de Tallin, la capital del país.