La filtración de la identificación de los cadáveres en la frontera genera un roce diplomático
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Confirmación de los cuerpos encontrados
Tras un día de incertidumbre, el Gobierno de Juan Manuel Santos confirmó que los cuerpos hallados en la frontera entre Ecuador y Colombia corresponden a los tres civiles ecuatorianos secuestrados en marzo por un grupo disidente de las FARC. A pesar de esto, el Ejecutivo ecuatoriano expresó malestar por la filtración de información sin una verificación científica total.
Identificación de las víctimas
El Ejército colombiano había localizado enterrados los restos de cuatro personas en el departamento de Tumaco, al sur del país. Tras realizar pruebas de ADN, el Ministerio de Defensa de Colombia confirmó que con un 99% de certeza se trataba de los tres trabajadores del diario ecuatoriano El Comercio y del jefe de seguridad de alias Guacho, líder del grupo disidente de las FARC.
Reacciones y contradicciones
Ante esta información, la Secretaría de Comunicación de Ecuador desmintió la identificación a través de cartas dentales y expresó su frustración por la filtración de datos antes de comunicárselos a las familias. Esto generó un roce diplomático entre ambos países, con una carta de protesta de Ecuador a Colombia.
Proceso forense y controversias
El proceso forense de los cadáveres comenzó en Cali, con la presencia de autoridades ecuatorianas y familiares de las víctimas. A pesar de que inicialmente se habló de tres cadáveres, el ministro de Defensa colombiano informó que se habían localizado cuatro cuerpos. Desde el secuestro, ambos Gobiernos han tenido declaraciones contradictorias sobre el caso.
Impacto en la región
La muerte de los periodistas y su conductor ha agravado la violencia en la frontera, un territorio que hasta entonces se consideraba solo de paso para el narcotráfico. Desde el inicio de los ataques en Ecuador, han muerto cuatro soldados y una pareja sigue secuestrada desde abril, sin información oficial por parte del Gobierno.
Fuente: elpais.com
