Para seguir una dieta saludable y tener una buena digestión, es fundamental consumir frutas y vegetales. Sin embargo, algunas personas ven difícil llegar a cumplir la “cuota diaria” que recomiendan los expertos. Pero, en forma de jugo o batido puede ser más fácil incorporar su poder nutritivo y obtener sus beneficios. Aquí te contamos más:
Energía con cáscara
La recomendación general indica que se deben consumir 2 tazas diarias de fruta y 2 ½ tazas de vegetales, basada en la pirámide nutricional. Se recomienda incorporar estos alimentos frescos, aunque también es válido optar por los congelados o en lata, preferentemente en agua.
¿Jugo o batido?
Al preparar el jugo se extrae todo el líquido de la frutas o vegetales, descartando la fibra, que es tan saludable para la digestión. Por eso una opción más saludable es utilizar la licuadora, que permite aprovechar todo el alimento. Hablamos de “batidos” o “licuados”. A continuación, te presentamos los mejores para regular la digestión:
1. Batido de kiwi
El kiwi es una excelente fuente de fibra dietética, ideal para mejorar el tránsito intestinal. También contiene actinidina, una enzima que ayuda a estimular el proceso digestivo y a asimilar de forma más rápida y eficaz las proteínas contenidas en otros alimentos.
2. Jugo de remolacha
Es una hortaliza con un alto contenido de agua y fibra que ayuda a depurar el organismo y favorece la digestión. Además, potencia la eliminación de líquidos, debido a que estimula la actividad renal, permitiendo de esa forma ser considerada como un diurético natural. También se le atribuyen propiedades para tratar la hipertensión, debido a que posee ácido nítrico, que actúa como vasodilatador.
3. Licuado de naranja
Para empezar el día lleno de vitaminas y minerales, los profesionales recomiendan el siguiente licuado: 2 naranjas, 6 uvas rojas, 6 fresas congeladas y ½ banana. Prepara primero el jugo de naranja con el exprimidor y luego agrégalo al vaso de la licuadora con el resto de las frutas. Esto te garantizará una buena dosis de vitamina C junto a un gran poder depurativo y diurético.
4. Batido de arándanos
Coloca en el vaso de la licuadora media taza de fresas, medio vaso de yogur natural, medio vaso de leche de soja, una cucharadita de miel de abeja, una cucharadita de semillas de linaza y media taza de arándanos congelados. Rendirá aproximadamente dos vasos, y te proporcionará saciedad, prevención contra el estreñimiento y un gran contenido antioxidante.
5. Jugo de piña
Coloca en la licuadora media taza de piña cortada en trozos pequeños, media taza de jugo de naranja y un puñado de hielo. Esta fruta es rica en vitamina C y fibra, y, al ser diurética evita la retención de líquidos. También corrige el estreñimiento y normaliza la flora intestinal.
6. Batido de fresas
Para dos vasos, exprime un limón, una naranja y agrégalo a la licuadora junto con una taza de fresas, una cucharadita de miel y un puñado de hielo. Esta mezcla es eficaz para combatir los gases intestinales, una buena fuente de vitamina C y una bebida que ayuda a depurar el organismo.
7. Zanahoria, apio y manzana
Licuar dos zanahorias pequeñas y ralladas con una manzana verde, dos tallos de apio, un puñado de espinaca fresca y un poco de agua o hielo. Esta bebida refrescante es ideal para desintoxicar y desinflamar el estómago. También es una solución para lograr un vientre más plano gracias a su bajo nivel calórico.
8. Tomates
Con solo licuar dos o tres tomates maduros obtendrás saciedad y sabor gracias a su abundante pulpa y fibra. Además, son ricos en licopeno, sustancia capaz de combatir el colesterol y fortalecer el sistema inmune. Distintos estudios vincularon el consumo de tomates con una mejora en la oxidación de los ácidos grasos, evitando su acumulación en sangre.
9. Jugo de sandía
Puedes obtener un licuado lleno de color, sabor y nutrientes con solo combinar un vaso de jugo de naranja con medio vaso de cubos de sandía sin semillas. Además de calmar la sed, ayuda a depurar el organismo, es diurético y da saciedad, lo que te permite comer menos y perder peso.
10. Lechosa
El consumo de papaya (lechosa) en jugos, batidos o como parte de una ensalada, estimularía el movimiento o motilidad intestinal (lo que permite combatir el estreñimiento) por su alto contenido de fibra y propiedades de la papaína, una de sus principales enzimas. También resultaría útil para combatir los síntomas de la indigestión: gases, distensión abdominal y flatulencia.