Un grupo de individuos armados ha secuestrado en Puerto Príncipe, la capital de Haití, un autobús con al menos 50 pasajeros a bordo y exigen 500.000 dólares de recompensa, según reportes de agencias de prensa.
Los hechos ocurrieron este miércoles, cuando el vehículo capturado cubría una ruta interprovincial.
Algunos de los pasajeros fueron despojados de sus pertenencias y luego liberados, mientras otros continúan como rehenes, dijo el presidente de la Asociación de Propietarios y Conductores de Haití, Mehu Changeux.
El secuestro del cura
El último caso se secuestro de impacto conocido fue el del padre Jean-Nicaisse Milien.
El sacerdote haitiano y otras nueve personas acababan de ser secuestrados en las afueras de Puerto Príncipe a principios de abril. Eran aproximadamente las siete de la mañana y se dirigían a la celebración de la asunción de un nuevo párroco en una iglesia de la zona cuando entre 15 y 20 bandidos con armas pesadas rodearon su vehículo.
“¡Vayan allí! ¡Vayan allí!”, ordenaron los individuos.
Pertenecían a la banda 400 Mawozo, el mismo grupo que secuestró a 17 misioneros el 16 de octubre cuando se dirigían a un orfanato. Ese grupo, que incluye cinco menores, entre ellos un bebé de ocho meses, sigue en cautiverio, en medio de amenazas de muerte. La banda quiere cobrar un rescate.
El secuestro de los 17 misioneros
Un grupo de hasta 17 misionarios cristianos de Estados Unidos y sus familiares fueron secuestrados en Puerto Príncipe cuando abandonaban un orfanato.
El grupo, que incluía niños, fue raptado por una banda criminal cuando se encontraban en un autobús que se dirigía desde el orfanato al aeropuerto.
A pesar del deterioro de la situación de seguridad
en Haití, la abducción de un grupo tan grande de estadounidenses sorprendió a las autoridades locales, asegura el rotativo.
Los secuestros se volvieron habituales en Haití desde inicios de 2020, se producen de forma indiscriminada y afectan a personas de cualquier índole social, ya que se convirtieron en una fuente de financiación de las bandas armadas que controlan numerosas barriadas de Puerto Príncipe y otras zonas del país.
Según denunció este mes el Centro de Análisis de Investigación en Derechos Humanos (CARDH), Haití registró un aumento “exponencial” de los secuestros en los últimos dos meses, con 117 en septiembre, cifra que supone un 60 por ciento más que en agosto.
Un total de 17 millones de dólares, un millón por cada uno de los secuestrados, es lo que exige por su rescate la pandilla haitiana ‘400 Mawozo’, responsable del rapto de un grupo de misioneros, ocurrido el pasado 16 de octubre. Así lo reveló el diario ‘The Wall Street Journal’, que cita al ministro de Justicia de Haití, Liszt Quitel.
El funcionario agregó que tanto la Policía haitiana como el FBI están asesorando a la organización religiosa Christian Aid Ministries, con sede en Ohio, a la que pertenecen las víctimas.
Quitel explicó que los delincuentes llamaron por primera vez al personal de ese movimiento en Haití a las 4:53 p.m. el pasado sábado, indicando sus demandas de rescate.
Desde entonces se han producido varias comunicaciones que podrían extenderse durante semanas, sostuvo.
Secuestros en alta
Desde el comienzo de este año, se reportaron 628 secuestros en el país, entre ellos 29 extranjeros de tres nacionalidades, aunque el CARDH indica que esta cifra aumentará a medida que otros países faciliten datos sobre sus ciudadanos. Las pandillas concedieron una breve tregua en los secuestros de dos semanas entre el asesinato del presidente Jovenel Moise, perpetrado el 7 de julio, y su entierro, llevado a cabo el día 23 del mismo mes.