Odalí Ferreras solo tiene 10 años. Una edad muy temprana tal vez, para discernir entre la mala o la buena música. Sin embargo, a este niño, esta década de vida le ha permitido tener la suficiente experiencia para saber por qué es un fanático empedernido de Romeo Santos. “Es que Romeo es un artista completo, que canta con mucho sentimiento. Y me gusta su estilo”.
Sorprendente su respuesta, ¿verdad? Pues así como es de asombrosa, es la forma en la que este niño de Constanza toca la guitarra y canta bachata. Hasta con el instrumento en su espalda puede alcanzar las notas musicales.
Como todo un bachatero hace complicidad con su guitarra para tocar temas de su artista favorito, que como ya se dijo es Romeo, así como de Anthony Santos, Frank Reyes, El Chaval y otros del género a los que define como su inspiración.
Su familia es de escasos recursos, pero sus sueños traspasan la necesidad. Odalí sueña con ser un gran artista, y sobre todo, con poder algún día cantar con su ídolo. “Mi papá me va a llevar a verlo el jueves a La Vega, estoy loco que llegue el día y ojalá pueda aunque sea saludarlo. Quiero que cantar un chín con Romeo”, cuenta emocionado el menor que comenzó a tocar a los seis años.
Le satisface el hecho de que en uno de los videos que tiene colgado en el Instagram de su padre Ramón Ferreras, donde canta la canción ‘Yo me quedo’ de Romeo y Zacarías Ferreiras, el astro de la bachata, le haya puesto un comentario que dice: “Dios lo bendiga”. Pero lo vieron tiempo después porque para entonces su madre, Elizabeth, estaba muy enferma. Hace tres meses que falleció.
Su familia y sus inicios en la música
Odalí apenas se repone de la muerte de su madre a causa de una neumonía. Su padre cuenta que en estos tres meses en la orfandad ha sido la música la que le ha ayudado al niño a calmar la pena. “Estamos yendo a la iglesia, allí él canta, y la compañía de su guitarra le ha dado fuerzas para seguir”. Solo tiene una hermanita, se llama Odaliza.
Tanto él como su progenitor dicen orgullosos que pese a todo, las calificaciones en la escuela no han bajado. Odalí es un estudiante meritorio, y muy querido por sus compañeros.
Es su carisma el que ha hecho que muchos se acerquen a disfrutar de su talento, el que ha cultivado gracias a las enseñanzas de su padre, quien también toca la guitarra y de vez en cuando canta con su hijo.
Quiere estudiar música
Aunque solo tiene 10 años, Odalí está consciente de su realidad.
“Me gustaría estudiar música, pero nosotros no tenemos dinero y aquí en Constanza no hay dónde estudiarla, pero me encantaría poder llegar a ser un gran artista como Romeo, con ese estilo que él tiene. Y con canciones como las de ahora, que me gustan demasiado”, termina diciendo este pequeño fanático que solo cuenta con el talento que la vida le regaló y con los sueños, que todavía son gratis.