Ramón Mercedes
NUEVA YORK, EE.UU.- Con indignación, repulsa y dolor reaccionaron los dominicanos residentes en esta ciudad por el asesinato el pasado lunes del niño Leonardo Montero, de nueve años, en el barrio El Hoyo de María, del ensanche Isabelita, en la República Dominicana.
Por el hecho fue acusado Miguel Ángel Reynoso Jiménez (El Negro), de 28 años, quien confesó haberle propinado varias puñaladas, violarlo sexualmente y luego quemar su cuerpecito, aunque alega no recordar nada porque llevaba tres días usando droga y tomando alcohol.
Entre las expresiones que se pueden escuchar en el Alto Manhattan y El Bronx figuran: “A parte de la pena máxima, hay que aplicarles torturas chinas”; “encerrarlo en la celda de homosexuales”; “prohibirle la comida y agua durante 30 días”; “nueve latigazos inter diario con alambres de púas durante 6 meses”, y “meterle las manos en agua hirviendo cada tres días”, son algunos de los deseos manifestado por los criollos en NY.
Otros sostienen que la sociedad dominicana tiene que revisarse rápidamente, porque los casos que se están dando con frecuencia en la nación dejan indicar que una “jungla” será un paraíso comparado con el país caribeño.
“Hay demasiado descomposición social”; “falta de valores y formación humana”; “no hay respeto por la vida ni a los derechos de las personas”; “los padres tienen que retomar su rol de enseñar y transmitir valores en sus hijos”, y la “justicia cumplir y jugar su papel verdaderamente contra los violadores de la ley, sin importar bandería política, estatus social, posición económica o apellidos”.
Los que así se expresaban rehusaron ser fotografiados por este reportero.